Cataluña actualiza su desescalada en el deporte. La principal novedad de estas medidas dictadas por el Procicat que afectan al sector deportivo es que ya no es necesario pedir cita para hacer actividades en el interior de los equipamientos deportivos. A partir del lunes 14 de junio, se aprueba sustituir la cita por un control de acceso y un registro que permita la trazabilidad de contactos y controlar el aforo, que sigue siendo del 70%. Los complejos podrán abrir de seis de la mañana a una de la madrugada.

En cuanto al aforo de los eventos deportivos, se permite la asistencia de público a competiciones deportivas con capacidad superior a 15.000 personas, con un aforo limitado al 20% en los torneos y partidos que se jueguen al aire libre.

Para las competiciones que se jueguen en recintos de hasta 15.000 personas, el aforo máximo es de del 50% al aire libre y limitado a 3.000 personas, y del 50% en espacios cerrados, un máximo de 1.000 personas, ampliable a 3.000 personas siempre que se cumplan las condiciones de ventilación y calidad del aire reforzadas y se garanticen las medidas de control de aglomeraciones.

Este anuncio llega dos semanas después de que el Gobierno catalán activara una nueva línea de financiación para el deporte por 3,5 millones de euros. El Gobierno autonómico, a través del Consell Català de l’Esport (CEE) ha abierto una nueva convocatoria pública de concesión de ayudas mediante préstamos, que se suma a la línea de financiación por 6 millones de euros puesta en marcha a finales de julio de 2020. Como ya ocurrió entonces, el Gobierno destinará esta financiación a atender las necesidades de liquidez de las organizaciones deportivas tras la Covid-19.

Hasta el momento, se han financiado 49 entidades deportivas por más de 6 millones de euros otorgados a través del Institut Català de Finances (ICF), entidad a través de la que también se concederá la nueva línea de crédito por 3,5 millones. El importe de los préstamos oscila entre los 20.000 euros y los 300.000 euros, a devolver en cinco años con un año de carencia incluido.

Entre esta línea de crédito, y la que se puso en marcha el pasado verano, la dotación total se eleva hasta 10 millones de euros con las que la Generalitat busca “contribuir a la reactivación del tejido deportivo” y “mantener la actividad deportiva y la pervivencia de las entidades que la gestionan”.

Desde el estallido de la crisis económica, la Generalitat ha anunciado ayudas directas por 80 millones de euros para el sector deportivo, a lo que se suman estos 10 millones de financiación a través del ICF.