Los gimnasios británicos logran un pequeño respiro. El Gobierno de Reino Unido ha anunciado este jueves que rebajará un 50% las tasas empresariales en 2022, lo que repercute en los centros deportivos y de fitness.
Este impuesto, que se aplica a todas las propiedades privadas que no son de uso como vivienda, recauda cada año 25.000 millones de libras anuales (29.600 millones de euros). La medida forma parte de los planes del Gobierno británico para dar un impulso a la economía tras la crisis provocada por la pandemia de la Covid-19.
Según ha explicado el ministro de Hacienda británico, Rishi Sunak, la medida “permitirá que el sistema de tasas empresariales sea más justo, con revalorizaciones más frecuentes cada tres años”. En su conjunto, el presupuesto del Gobierno de Boris Jonhson para el próximo año recorta los tipos aplicables a las empresas en 7.000 millones de libras (8.292 millones de euros).
El fitness británico está inmerso ya en un plan para ganar hasta 5 millones de socios hasta 2030. UKActive, patronal británica de los gimnasios, presentó el pasado septiembre un plan al Gobierno de las islas para elevar la penetración del fitness, del 15% al 20% de la población, lo que supondría alcanzar los 15 millones de abonados en 2030. La inversión total a este plan se eleva a 2.000 millones de libras (2.334 millones de euros).