No es habitual que un equipo de élite entrene en el mismo gimnasio al que acuden sus aficionados. Tampoco es frecuente que un deportista amateur disponga de un complejo de 38.000 metros cuadrados para ejercitarse. Uno de los ejemplos que apuesta por este modelo es Bakh, la ciudad deportiva del TD Systems Baskonia y en la que a menudo también entrenan los jugadores del Deportivo Alavés, un complejo que acaba de renovar su gimnasio de la mano de BH Fitness, patrocinador y proveedor de equipamiento del grupo vitoriano.
El complejo ha modernizado toda la zona de cardio y fuerza, así como el área de entrenamiento funcional para adaptarla a las nuevas tendencias de la mano del fabricante vasco de máquinas de fitness. “Creemos que el área de cardio y fuerza estaba a un nivel alto, y queremos hacer lo mismo con el espacio funcional, que ampliaremos”, explica a 2Playbook Borja Junco, gerente de una instalación que da servicio a 5.300 socios, además de los jugadores de LaLiga y la ACB y su cantera. El complejo promedia 1.500 accesos diarios.
“Aquí convive el usuario amateur con el profesional, y hay un sentido de pertenencia grande del socio cuando entrena al lado de un jugador”, reconoce Junco. Ese sentido de pertenencia y los cambios que ha experimentado la instalación ha provocado que el complejo tenga una tasa de retención de usuarios del 82%. “Durante la pandemia hemos tenido bajas de en torno al 30%, pero no ha afectado a la cuota anual, que se paga una vez al año y se realizó antes de la crisis; ahora lo que queríamos era compensar su fidelidad mejorando la instalación para que sigan con nosotros en 2021”, afirma Junco.
Los cambios van más allá de la renovación de todo el equipamiento, la digitalización de la sala y la ampliación del área funcional. La mirada ahora está puesta en febrero, el momento en que la gerencia sabrá si el socio ha renovado su confianza por un año más, con el pago por adelantado de la cuota anual, a las que le siguen las suscripciones mensuales por el uso de los espacios. “En marzo esperamos contar con una zona de entrenamiento al aire libre, donde habrá gimnasio exterior, espacio de calistenia y clases dirigidas en un entorno de naturaleza”, detalla.
También se podrán realizar clases dirigidas, así como cursos de pádel. Asimismo, dentro del club se habilitará una zona de coworking o sala de estudios. “Es a lo que nos ha empujado la pandemia; vemos que hay mucha gente teletrabajando y habilitaremos una zona para ofrecer un buen ambiente de trabajo y conectividad”, afirma Junco, que reconoce que los socios han respondido bien a las mejoras.
El Bakh mejorará su espacio de entrenamiento en el exterior y habilitará un espacio de coworking
El complejo también cuenta con centro de salud, restaurante, pista de hielo, piscinas interiores y exteriores, zona de aguas, diez pistas de pádel y dos de tenis, y ha proyectado en 8.500 el número de socios que podría alcanzar en el futuro tras las mejoras. Antes de la pandemia, el Bakh generaba un flujo de cada de 1,4 millones de euros.
La renovación del gimnasio forma parte de la primera fase de mejoras de la ciudad deportiva, ubicada junto al Fernando Buesa Arena, donde el Baskonia disputa sus partidos como local. Aún hay espacio para ampliar el complejo, puesto que el Deportivo Alavés adquirió tres parcelas y la idea es levantar un hub deportivo, con residencia para 250 estudiantes, universidad del deporte y centro de entrenamiento, además del renovado gimnasio.
Se desconoce de cuánto será la inversión total, pero la acometerá el Deportivo Alavés, que adquirió a Baskonia el 50% del Bakh por 5,3 millones de euros. Según un estudio de Kpmg, cuando la ampliación del complejo esté finalizada la instalación generará un impacto económico de 29 millones de euros, entre la actividad del complejo y el gasto de los estudiantes que se trasladen a Vitoria.
Antes de la pandemia, el grupo Baskonia Alavés contaba con un presupuesto total de 109 millones de euros. Un total de 79 millones correspondía al Deportivo Alavés, por los 19 millones del Baskonia y los 11 millones restantes que corresponden al resto de líneas de negocio, entre las que se incluye el Bahk.
Acometidos los proyectos de la nueva ciudad deportiva, la proyección es que el grupo eleve su presupuesto hasta 127 millones de euros, con un alza del 16% del Alavés, hasta 92 millones, un incremento de un millón en el Baskonia y una mejoría del 36% en las otras líneas de negocio, hasta 15 millones de euros.