24 Hour Fitness dibuja su futuro tras abandonar el concurso de acreedores. La cadena estadounidense de gimnasios ha decidido reducir su red de centros para, a su vez, recortar los gastos en plena pandemia. “Nos sentimos bien con los centros que tenemos ahora”, ha explicado el director ejecutivo de la compañía Tony Ueber, a Club Industry.
La empresa se declaró en concurso de acreedores el 15 de junio, una situación que abandonó en diciembre, tras pactar con acreedores y reducir su deuda en 1.200 millones de dólares (987 millones de euros). Como parte del proceso, desinvirtió en activos, cerró centros y redujo los gastos para hacer viable su actividad, que se ha visto frenada durante el confinamiento.
El resultado es que la empresa ahora opera alrededor de 300 clubes en 13 estados de EEUU, por los 450 centros que operaba antes de la pandemia. Antes de que se declarara en concurso de acreedores, la dirección de la compañía identificó que debía “racionalizar” su cartera de bienes inmuebles y realizar una revisión estratégica sobre qué instalaciones debían seguir operando, en función de factures financieros, el rendimiento del club en el pasado y su potencial a futuro, así como las ubicaciones geográficas.
Ueber ha asegurado que la empresa invertirá en mejorar sus centros, con nuevo equipamiento, renovando vestuarios y zonas de entrenamiento. Asimismo, seguirá trabajando en el área digital a través de la app 24GO, donde ofrece más de 1.000 entrenamientos gratuitos. También ofrece 24GO Plus, una suscripción digital premium que está incluida en el abono que contratan los clientes, y que ofrece entrenamientos personalizables.
Asimismo, la cadena ha diseñado un plan de ventas para “conectar con los clientes allí donde estén y venderles nuestro servicio del modo que ellos quieren, en lugar de como la empresa quería venderles”, ha añadido Ueber.