FIFPro mira los toros desde la barrera, pero con el temor de ser corneado. El sindicato de futbolistas ha reaccionado con firmeza este lunes al anuncio de la nueva Superliga de fútbol. “Podría causar un daño irreparable”, ha asegurado en un comunicado.
La asociación mundial, que representa a 60.000 jugadores de 64 países, destaca que “esta decisión deja a los jugadores y sus sindicatos con muchas preocupaciones y preguntas sobre su impacto no solo en el tejido y la identidad cultural del fútbol, sino también de manera más práctica en sus carreras”.
“El fútbol se basa en su herencia social y cultural única, que no sólo le da una relación inigualable con sus aficionados, sino que también ha creado el motor para difundir el juego profesional como ningún otro deporte. Para que esto se mantenga, es fundamental una cooperación sana y solidaria entre las competiciones nacionales e internacionales”, agrega.
Asimismo, FIFPro, denuncia mala gestión previa por parte de los gestores y los órganos de gobierno del fútbol europeo. “Es importante señalar que la llegada a este punto de potencial disrupción es un reflejo de una gobernanza en la que algunos han disfrutado de poderes desproporcionados y, el resto, incluidos los que están en el corazón del juego, los jugadores, pero también los aficionados, se pasan por alto en gran medida”.
Por último, el sindicato ha querido mandar un mensaje a los organismos como Fifa y Uefa, que han amenazado con dejar sin Mundial o Eurocopa a los futbolistas que jueguen la Superliga: “Esto es inaceptable. Nos opondremos a las medidas que obstaculicen los derechos de los jugadores, como la exclusión de sus selecciones nacionales”.