El 8 de mayo de 2019, la Fifa asestaba un severo golpe en la línea de flotación del Chelsea FC. El regulador del fútbol mundial sancionaba al club londinense con dos ventanas sin poder fichar futbolistas profesionales. ¿La razón? Incumplir la normativa internacional en materia de fichajes de menores. Nada más ejemplarizante de cómo se ha de cuidar a los niños que castigando a los adultos. Los blues recurrieron, y obtuvieron una rebaja, con lo que el pasado invierno ya pudieron fichar. Sin embargo, un verano sin poder sacar la billetera le bastó a la dirección deportiva para entender que, a veces, por no decir casi siempre, lo mejor está en casa. La cantera por necesidad en una de las grandes ligas que menos apuesta por ella, según el Cies Football Observatory.
Consecuencia de ello es que el Chelsea logró ser el club en el que más presencia han tenido los canteranos en sus partidos, alcanzando el 30%, frente al 11,9% general de la competición. Triplicando las cifras de la competición, el club blue consiguió ser tercero en liga y clasificarse, un año más, para la Champions League. En ello contribuyeron los ingleses Tammy Abraham, Ruben Loftus-Cheek, Callum Hudson-Odoi y Fikayo Tomori, o el escocés Billy Gilmour. También se ha asentado en esta última temporada el central danés Andreas Christensen, y debutaron los neerlandés Ian Maatsen o el británico Faustino Anjorin, ambos de 18 años. La calculadora juvenil podría seguir sumando unidades esta temporada en el equipo de Frank Lampard, que ha convertido una molestia en virtud.
El Manchester United FC es el otro club grande que ha decidido apostar fuertemente por su cantera en los últimos años. El equipo rojo de Manchester fue la plantilla más joven de la Premier en la 2019-2020, con una media de 25,3 años, y un porcentaje de minutos jugados por sus canteranos del 27,6%.
Dos archirrivales como Tottenham y Arsenal se sitúan en el cuarto y quinto puesto, con un 17,8% y un 17,7%, respectivamente, mientras que los dos mejores equipos de la liga en los últimos años, Liverpool FC y Manchester City FC, se ubican en la parte baja, con una media del 9% y 2,9% respectivamente.
El farolillo rojo de esta tabla la ocupa un club que va por libre en este aspecto. El Wolverhampton Wanderers FC, propiedad del fondo chino Fosun, que trabaja en asociación con el representante de jugadores Jorge Mendes. Desde que tomara las riendas del club en 2016 (por entonces, jugaba en Championship, la Segunda división inglesa), la dirección deportiva de los Wolves está apostando por el fichaje de las mayores perlas portuguesas. Juventud sí, pero no de cantera. Por ello, sólo el 0,4% de los minutos lo juegan futbolistas de su academia.
El Covid-19, un nuevo y duro rival para las canteras
El éxito blue, sin embargo, quedará esta temporada en anécdota. El Covid-19 ha hecho convulsionar al mundo del fútbol y la Premier, la liga más rica del mundo, registrará importantes recortes en sus plantillas. Los salarios de los nuevos contratos con los futbolistas se recortarán hasta un 50% y los equipos adelgazarán en fichas, pero también paralizaron inversiones, según un informe elaborado por la firma de servicios profesionales BDO.
En el estudio, en el que han tomado parte buena parte de los directores financieros de los clubes ingleses, también se apunta a la cantera. Lo que en las islas británicas se conoce por academy. El primer pensamiento es creer que, ante una crisis, los equipos más poderosos copiarían la fórmula Chelsea, pero no será así. No llega al 25% el número de clubes que aumentarán su inversión en sus escuelas formativas esta temporada, mientras que el 58% no prevé que lleguen nuevos jugadores de las categorías inferiores al primer equipo.
“El desarrollo de la cantera sigue siendo clave en los planes de futuro de los clubes, pero, este año, el 43% de ellos han indicado que las inversiones en sus infraestructuras de las academias quedarán congeladas”, apunta Luke Leney, socio-director de BDO en Reino Unido.
Entre otros motivos, la cautela de los clubes en esta área tras la pandemia tiene relación con la financiación, que es alta por los requerimientos del desarrollo de unas instalaciones adecuadas para la academia en un medio y largo plazo, y la sombra del descenso. Algunos clubes, en especial los más humildes, creen que es muy arriesgado la apuesta decidida por jugadores jóvenes de casa para mantener la categoría, por lo que prefieren buscar futbolistas asequibles y más experimentados. Salir de la Premier supone perder más de 100 millones de euros por derechos de televisión.
La Liga retiene más a los de casa que la Premier
Abriendo el mapa, la de España es la gran liga que más tira de sus canteranos. También influye en este dato, sin duda, la política de retención de talento de algunos clubes españoles y el prolífico negocio que supone para los equipos de la Ligue 1 la venta de sus jóvenes promesas.
La Liga tiene un promedio de 17,5% de minutos disputados por futbolistas canteranos de los veinte clubes que compusieron la competición el pasado curso. Entre las ligas domésticas europeas, el podio lo componen las de Suiza (25,1%), Eslovaquia (23,4%) y Noruega (22,5%). Lejos quedan de ellas la Ligue 1, con un ratio de 14,1%; la Premier, con un 11,9%; la Bundesliga, con un 10,4%; y la Serie A, con tan solo un 5,5%.
Poniendo la lupa sobre el último lustro, los datos del Cies son claros: el porcentaje de minutos de jugadores jóvenes -menores de 21 años-, donde abundan los canteranos, entre las cinco grandes ligas europeas se registró en la Premier League, con un 7,1% de los minutos, mientras que el más alto se dio en la Ligue 1: 15,4%. La Liga fue la segunda competición en la que menos se apostó por la juventud, con un 9% de minutos de media, casi empatada con la Seria A (9,3%), y algo lejos de la Bundesliga, que registró un 13,1%.