A falta de poco más de un mes para el inicio de la competición, la Real Federación Española de Fútbol comienza a dibujar el papel sobre el que se escribirán los recursos económicos de la nueva Primera Rfef. El organismo presidido por Luis Rubiales ha sacado la licitación de los derechos audiovisuales, que se venderán de forma centralizada en un lote único de 15 millones de euros al año para las temporadas 2021-2022 hasta 2023-2024. La factura final, por tanto, alcanza los 45 millones.
El paquete incluye todos los partidos y los play-offs de ascenso a LaLiga SmartBank, según ha detallado en las bases del concurso para la venta conjunta de los derechos audiovisuales. En él también se destaca la ausencia de un club que no ha cedido todavía sus derechos a la Rfef. Por otro lado, a la cifra del pago por lote se requerirá una inversión de tres millones de euros para la producción, según ha podido saber 2Playbook.
Poniendo las cifras solicitadas en la licitación con otras competiciones nacionales, la ACB ingresa 12 millones de euros anuales por la venta de los derechos audiovisuales del mejor baloncesto por equipos de España.
En cuanto al calendario del proceso del concurso, la fecha límite para presentar ofertas será el próximo 28 de julio. Dentro de los siguientes veinte días hábiles se realizará la adjudicación provisional. Eso significa que el acuerdo llegará in extremis a la primera jornada de competición, prevista para el 29 de agosto.
La Rfef aspira a llevar a 45 países o regiones europeas la categoría de bronce del fútbol español
Algunos clubes de la nueva categoría, compuesta por 40 equipos, divididos en dos grupos, se han mostrado “muy preocupados” por la falta de novedades respecto a este punto. Desde la federación se les prometió unos ingresos cercanos a los 300.000 euros por temporada, y si logra el objetivo de colocar el lote, lo podría conseguir.
En concreto, de repartir el 100% de lo facturado a los clubes, cada equipo cobraría 375.000 euros anuales. Un dinero a tener en cuenta en esta división y los presupuestos que se manejaban hasta la fecha. Además de en España, la Rfef ha creado un segundo lote con el que aspira a vender los derechos de la Primera Rfef en Europa con paquetes exclusivos para 45 países o regiones, incluyendo Alemania, Francia, Reino Unido o Portugal, entre otros.
Césped natural, 4.000 espectadores y aval de 200.000 euros
Entre los requisitos exigidos por la federación a los 40 clubes de la nueva división de bronce del fútbol español, todos los campos deberán contar con césped natural y con un aforo mínimo de 4.000 espectadores para 2023-2024.
Además, se solicitará un aval mínimo de 200.000 euros a cada club para participar en la competición. La cuantía se iría incrementando en función del presupuesto de los clubes.
En contraprestación, la Rfef se ha comprometido a buscar un espónsor que compre los naming rights de la competición y permita hacer crecer el negocio de esta nueva división, la última antes del fútbol profesional.
Por ahora, Rubiales se ha encontrado con el rechazo de la patronal de los clubes de la antigua Segunda B y Tercera División, ProLiga, que ha impugnado ante el CSD las bases de competición de la nueva liga, alegando que varias de las condiciones establecidas por la federación son “prácticamente imposibles” de cumplir para la mayoría de equipos. El organismo, que representa a 250 clubes de estas dos categorías, se muestra también contraria a la implantación de un salario mínimo, “sin haberse producido negociación alguna con los clubes”, y la exigencia de avales para competir.