La primera reunión entre la Uefa y la Superliga europea ha finalizado con un único nexo en común: el diálogo. “Abierto”, en el comunicado del regulador europeo y organizador de la Champions, y “constructivo”, en el caso de A22 Sports Management, la promotora creada ad hoc para la competición y dueña de European Super League Company. Entre medias, las posturas continúan enfrentadas.
La Uefa, que ha contado con el apoyo de ligas, clubes y futbolistas en la reunión, en la que han reiterado “su oposición a proyectos rupturistas”. En el encuentro han estado presentes Javier Tebas, presidente de LaLiga; Miguel Ángel Gil Marín (Atlético de Madrid), como miembro de la ECA; y el exfutbolista David Aganzo, en su calidad de presidente de Fifpro.
Entre los detalles aportados por el regulador destaca que, “con sorpresa”, los participantes en la reunión escucharon a Bernd Reichart, nuevo director general de A22 Sports, decir que “esta empresa no representa a ningún club, incluidos los tres que siguen apoyando abiertamente el proyecto (de la Superliga)”.
“La Uefa y las partes interesadas en el fútbol siguen comprometidas con los fundamentos del fútbol europeo, que se basan en la apertura, la solidaridad y la meritocracia y sirven a objetivos más amplios de los principios deportivos y el interés de la sociedad, en lugar de basarse en los privilegios y los derechos propios”.
Superliga: “Necesitamos hablar, aunque a veces resulte complicado”
Por su parte, A22 ha emitido otro comunicado en el que ha centrado su crónica de la reunión en la “libertad de expresión y el libre intercambio de ideas”. “Ha sido bueno reunirse con Uefa y estamos contentos que hayan aceptado nuestra invitación a un diálogo abierto”, ha apuntado Reichart, al que han acompañado Anas Laghrari y John Hahn, fundadores de A22 y ejecutivos muy próximos a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y principal promotor de la competición.
“Nuestra conclusión al finalizar la reunión es que el status quo es satisfactorio para la Uefa. Este posicionamiento era de esperar ya que es actor, único y dominante, de las competiciones europeas de clubes desde 1955. Esta estructura de monopolio está siendo examinada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, cuyas conclusiones serán previsiblemente anunciadas en primavera de 2023”.
Asimismo, la promotora ha incidido en “su compromiso total con competiciones abiertas basadas en los méritos deportivos y en el papel fundamental que juegan las ligas nacionales, totalmente complementarias del nuevo formato”. Esta nueva postura contrasta con el torneo cerrado que planteaba la Superliga en su concepción original.
Tras el comunicado de A22, la Uefa ha respondido con dureza: “Afirman no representar a los tres clubes restantes. Se niegan a definir cuál es su supuesto nuevo enfoque. Dicen querer el diálogo, pero cuando se les presenta la oportunidad, no tienen nada que decir”.
Y ha añadido: “El momento de dialogar de verdad es mañana, cuando la Convención sobre el Futuro del Fútbol Europeo vuelva a reunirse aquí en Nyon (Suiza). Las asociaciones nacionales, los clubes, las ligas, los entrenadores, los jugadores, los aficionados, los agentes y los administradores se reunirán para debatir los verdaderos problemas a los que se enfrenta este deporte, no para dedicar el tiempo a complacer a los banqueros y a los ejecutivos de marketing con ideas que ponen en peligro el futuro del juego favorito del mundo”.