Las actuales estructuras del fútbol europeo vuelven a hacer una demostración de fuerza frente a la Superliga. La Premier League ha acordado imponer una multa de 22 millones de libras (25,5 millones de euros) a Manchester City y United, Arsenal, Liverpool, Arsenal y Tottenham por promover en su momento esta competición. Ello, pese a que 48 horas después de adherirse anunciaron su baja ante la fuerte oposición pública a la idea de un torneo cerrado.
El dinero de la multa se destinará a financiar proyectos de desarrollo del fútbol base, de apoyo a la comunidad y a los aficionados, según ha confirmado la Premier League tras ser avanzado esta mañana por la BBC. Al margen del golpe económico, la cadena pública señala que el denominado Big Six se expone a la deducción de 30 puntos en la clasificación si vuelven a promover una ruptura unilateral de la actual pirámide competitiva y una nueva multa de 25 millones de libras (29 millones de euros).
La Premier es la primera de las tres grandes ligas con clubes implicados en la Superliga que impone sanciones. Cuestionado por esta posibilidad en abril, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, señaló: “No corramos con el tema de las sanciones”. Esta posición no ha variado después de que Uefa ya haya alcanzado un acuerdo con los equipos que han dado marcha atrás y haya abierto expediente a Real Madrid, FC Barcelona y Juventus por seguir adelante con la propuesta.
El acuerdo, además de con los seis clubes ingleses, se firmó con Atlético de Madrid, AC Milan e Inter. Los nueve equipos se exponen a una multa de 100 millones si reinciden en buscar “una competición no autorizada”, una sanción que se rebajará a 50 millones “si incumplen cualquier otro compromiso que hayan contraído en la Declaración de compromiso del club”. De entrada, ya han asumido que un 5% de lo que debían percibir en un un año por Champions o Europa League no lo cobrarán.
