Este verano han vuelto las verbenas de pueblo, los Sanfermines, la masificación de las playas… y el corredor aéreo entre LaLiga y la Premier League. Los clubes ingleses han sido los animadores del mercado de fichajes español, que en algunos casos han activado o modificado sus planes a través de una venta a las islas. El mejor ejemplo, el de Alexander Isak, traspasado por 70 millones de euros al Newcastle United, y que ha desencadenado en la llegada a Donostia de Umar Sadiq, por 20 millones. El club andaluz, con ese dinero, ha fichado a otros dos atacantes de 20 años, con proyección de futuro, en el último día de mercado. Un efecto dominó que anhelaban los directores deportivos y gerentes españoles.
En total, este verano la Premier ha pagado 259,5 millones por doce futbolistas de clubes españoles, la cifra más alta del último lustro. De hecho, LaLiga es la competición extranjera de la que más talento ha importado la liga más rica del mundo, según datos de Transfermarkt.
Este dato evidencia dos puntos: el fútbol inglés es el gran dinamizador de que fluya el dinero en todo el fútbol europeo y, por otro lado, su necesidad de fichar fuera lo que no es capaz de desarrollar dentro –a pesar de las millonarias inversiones que realiza en cantera–, y el título de gran exportador que se ha ganado LaLiga, cuyos equipos saben que una venta a la Premier puede garantizar su sostenibilidad esa temporada, como ya la saborean Real Sociedad y Sevilla FC.
Durante la pandemia, el mercato se paró. Se secaron las aguas y las libras dejaron de nadar. Esto generó graves problemas a muchos equipos, que esperaban vender para salvar las pérdidas. El estricto control económico de LaLiga obliga a los clubes a ingeniárselas para dar salida a algunos futbolistas si quieren cumplir con el límite salarial o renovar la plantilla cuando tienen superado el límite de gasto. Esto no sucede en Inglaterra, donde, amén del laxo fair play –se estudia ahora endurecerlo–, los propietarios de sus equipos pueden asumir pérdidas cada año y seguir gastando.
Además, sus ingresos audiovisuales están a años luz de los del resto de grandes ligas. Se ha garantizado ya 10.300 millones de libras (11.924 millones de euros) hasta 2025, y ya en este ciclo recién iniciado los derechos internacionales han dado el sorpasso a la factura nacional. Su capacidad de impactar a nivel global no caerá. España, eso sí, se le puede acercar, como ya está consiguiendo. Por todo ello, es lógico que sea la liga que más haya gastado este verano en fichajes: 2.240 millones de euros. Más que nadie, más que nunca.
LaLiga se ha quedado este verano como la cuarta en gasto (505,7 millones), y con un balance negativo de 52,4 millones de euros, muy lejos de los 1.360 millones de negativo que han asumido los equipos de la élite inglesa. Más han gastado en la Serie A (749,2 millones), y en la que prácticamente han sacado del banco lo mismo que ha entrado, y la Ligue-1 (554,9 millones), donde el PSG ha copado el 27% de esa inversión.
Estos últimos datos ligan bien con los de la Fifa, que elaboró un informe sobre el flujo de traspasos en el fútbol en la última década. En él, los clubes españoles destacan como los que más facturaron en el mercado internacional de fichajes entre 2010 y 2020, con 6.200 millones de dólares (1.000 millones más que Inglaterra). Y el corredor entre ambos países fue el que más dinero movió: 2.435,8 millones de dólares en 367 traspasos de clubes españoles a ingleses.
El caso Nottingham Forest
Mucho se ha hablado este verano del Nottingham Forest. Y no por la vuelta, 23 años después, del único club que ha ganado más Copas de Europa que ligas nacionales. El equipo ya no es propiedad de un inglés, sino del multimillonario griego Evangelos Marinakis, y se ha colocado en el quinto puesto de la tabla de gasto en fichajes de toda Europa –por delante del Barça y el Manchester City– con una inversión de 162 millones de euros.
El club tiene seguros 125 millones de euros por jugar este curso en la Premier –es el dinero que recibirá el colista–, pero tan cierto es eso como que acumula unas pérdidas de 54 millones de libras (63 millones de euros) desde 2014-2015; y que arrastra un resultado operativo negativo de 119 millones de libras (138 millones de euros) en este mismo periodo, según datos recabados por 2Playbook Intelligence.
Por lo tanto, ¿es sólida esa corriente popular que dice que cuanto más se gaste en fichajes, mejor es la liga? Quizá habría que atender también, o principalmente, a la optimización de los recursos. Algo que históricamente han hecho los clubes alemanes y que ahora en España es regla general.
Más cesiones y retoques en los contratos para cumplir límite salarial
En tiempos de pandemia, más de uno, más de dos y más de tres clubes españoles han pedido a LaLiga algo más de manga ancha para fichar dentro de la competición para dinamizar el mercado interior. Sin esa llamada desde la Premier, todos los equipos parecían esperar en cajones a la espera de poder cabalgar. Una táctica conservadora que, sin embargo, le ha llevado a ser la gran liga que menos dinero ha perdido entre 2019 y 2021, si se elimina de la ecuación la reestructuración del Barça.
El límite salarial es otro de los continuos temas de debate y que influye de manera primaria en el mercato. Pese a las restricciones pactadas por los clubes, la competición cuenta con artículos y herramientas que pueden usar los equipos para incrementar el límite salarial. Las ampliaciones de capital de Valencia CF, RCD Espanyol o Girona FC en el último año son un buen ejemplo, o la presentación de avales por parte de los directivos de Barça y Real Betis.
Este verano, además, han proliferado las renovaciones de contrato en las que se rebajan los sueldos esta temporada a cambio de firmar por más años. Fórmula que LaLiga ha vigilado, puesto que, igual que con los patrocinios, su órgano de control fiscaliza que los sueldos se ajusten a una lógica de mercado.
Por último, las cesiones. A diferencia de los tiempos de pandemia, donde la falta de liquidez a corto impedía a los clubes a fichar jugadores, apostando por la cesión con opción de compra obligatoria, de cara a la 2022-2023 se han visto muchas renovaciones de contrato acompañadas de cesión. Una opción interesante para los clubes en busca de ganar un año para encontrar un traspaso el próximo verano.
Además, han vuelto las cesiones puras y duras, y no sólo en España. En Italia, la Juventus ha cedido en el último día a dos futbolistas (Arthur y Zakaria) a la Premier, lo que le permitirá el límite salarial en un momento en el que la Uefa tiene amenazados a varios grandes clubes europeos – entre ellos, la Vecchia Signora– por el fair play financiero.
Como reflexión final, a sabiendas que extraoficialmente las operaciones del mercato arrancan ya en mayo, merece un debate dentro de las grandes ligas y los clubes si es lógico alargar la ventana de verano hasta el 1 de septiembre. El jueves se hicieron traspasos millonarios en Inglaterra, mientras los equipos involucrados jugaban un partido de liga.