Mapoma se ha convertido en la gestora de referencia del mundo del running en Madrid. Surgida en el 1978 a partir de la creación del primer Maratón en la capital, considerado decano de esta prueba en España, ha ido creciendo hasta hacerse con la organización de ocho carreras anuales a lo largo de la Comunidad De Madrid. Y hoy ya cuenta con una liga de carreras propia, cuya joya de la corona son las Rock ‘n’ Roll Running Series, que gestiona con un presupuesto de dos millones de euros anuales.
Esta es la inversión anual que requiere el conjunto de sus pruebas, tal y como explica a 2Playbook, David Rumbao, director de márketing de Mapoma. Al Maratón se le sumaron el Medio Maratón y el 10K en 2012, cuando pasaron a estar bajo el paraguas de las Rock ‘n’ Roll Running Series. “Significó un paso muy importante para nosotros, porque trae muchos atletas de fuera”, explica el ejecutivo.
La presencia de atletas internacionales es fundamental para el funcionamiento del evento. Antes de la pandemia llegaban a las calles madrileñas más de 10.000 personas procedentes de más de 100 países. Una tercera parte de los 30.000 corredores que acostumbraban a participar en el evento. Para 2022, la organización calcula que recibirán unos 5.000 atletas del extranjero.
Pese a que las previsiones para la edición del próximo 24 de abril todavía se quedan a medio camino de las cifras de 2019, suponen un soplo de aire fresco para un evento que ha funcionado durante dos años solo con participantes españoles. Desde Mapoma se trabaja con la vista puesta en 2023, año en que sí se espera que se pueda recuperar todo el terreno perdido. Para ello, preparan una campaña para llamar a la participación centrada en volver a atraer a corredores de otros países.
Las principales vías de ingresos son las inscripciones, que suponen un 60% de los ingresos, y los patrocinios, que aportan el 40% restante. Además, Rumbao destaca que no disponen de ninguna subvención de las instituciones. En su cartera de patrocinios se encuentran la aseguradora Zurich como title sponsor, Total Energies como patrocinador principal, Adidas como proveedor técnico y otros socios como Ibercaja, Coca-Cola, Alcampo y Plátano de Canarias.
Junto a la inclusión en las Rock ‘n’ Roll Running Series, el otro punto de inflexión en su estrategia se produjo hace tres años. La gestora de carreras decidió unificar todas las pruebas solidarias que organiza a lo largo de la Comunidad de Madrid en una liga “con el objetivo de tener más visibilidad y captar más corredores”. Así, crearon la Mapoma Running League, que cuenta con el patrocinio de AS.
En concreto, son ocho carreras las que conforman el calendario y que permite a los atletas de todos los niveles competir entre ellos mediante un ranking de puntos general y con entrega de medallas a todos los participantes que logran acabar cada prueba.
Otro de los aspectos que más relevancia han cogido en los últimos años ha sido el de los proyectos benéficos. “Desde 2015 Mapoma hemos donado 200.000 euros en causas solidarias”, explica Rumbao. Esta temporada han impulsado una campaña por la cual el 100% de la venta de merchandising se destina a la compra de un exoesqueleto para los niños con problemas de movilidad.
De hecho, los programas de solidaridad son una de las particularidades que caracterizan a la compañía y lo que lleva a Mapoma a intentar cerrar el ejercicio sin beneficios y sin pérdidas. “En caso de beneficios los destinamos a causas solidarias y eso es lo que hemos hecho durante el 2021”, asegura el directivo. Pese a ello, las pérdidas alcanzaron los 200.000 euros durante la pandemia.
Pioneros a finales de los 70 para poner en marcha el primer maratón de España y uno de los primeros del viejo continente, Rumbao señala a Boston y Nueva York como sus principales referencias. En la actualidad los tentáculos de Mapoma llegan a la organización de cerca de 20 eventos al año y engloba a una comunidad de más de 100.000 corredores.
La AD Mapoma se creó hace 44 años como una asociación deportiva sin ánimo de lucro para la gestión del Maratón e inmediatamente comenzó a funcionar como club de atletismo. “Somos una comunidad de cerca de 500 corredores con contacto diario durante todo el año”, indica Rumbao. Esos vínculos con su comunidad y la relación que consiguen establecer con los participantes de la Mapoma Running League es uno de sus puntos fuertes.
Entre sus instalaciones destaca el Mapoma Run Center, un centro de entrenamiento dirigido para la práctica del running y el fitness. Pese a que no cuenta con una pista de atletismo propia, disponen de cerca de 500 socios. “En un evento como el maratón de Madrid hay 2.000 personas trabajando” explica Rumbao. En el caso del club de atletismo hay alrededor de 20 empleados entre todas sus áreas.
