Están a punto de caerse dos plazas de la Ligue-1. Los clubes franceses de fútbol, tras semanas de debate, han aceptado la propuesta de la dirección de la gestora de la competición para reducir a 18 el número de equipos participantes en la máxima categoría a partir de 2023-2024. Resta sólo la votación de la Asamblea General, prevista para este jueves, según avanza L’Èquipe.
Esta reducción, propuesta por el presidente de la LFP, Vincent Labrune, responde a la crisis económica –“necesitamos reducir el reparto de los ingresos”, aseguró- provocada por la Covid-19 y, también, a la presión emitida por su histórico socio audiovisual, Canal+.
El grupo francés ha puesto esta condición para negociar por el próximo ciclo de derechos audiovisuales (2021-2024), que deberá concretarse este mismo mes de junio. Tras la brusca salida de Mediapro, Canal+ se quedó con los derechos de TV de la liga para el cierre de 2020-2021 con una rebaja del 50%.
Ahora, sin embargo, más allá de la reducción de equipos, Canal+ sólo quiere los dos grandes partidos de la jornada para el próximo ciclo por 370 millones de euros anuales. En este escenario, la LFP negocia actualmente con beIN Sports para que se quede con el resto de paquetes: los otros 8 partidos de la Ligue-1 y la Ligue-2 en su totalidad.
El grupo audiovisual qatarí habría pedido a cambio un notable descuento sobre los partidos de la Ligue-2, que se emitirán en su totalidad -actualmente sólo se ofrecen dos-. El acuerdo para el próximo ciclo pasaría de 32 millones a 20 millones de euros.
Cuatro descensos a la Ligue-2
De concretarse al acuerdo, beIN formaría parte de la transformación del fútbol de élite francés, que verá descender cuatro equipos a la Ligue-2 en 2022-2023.
En cambio, sólo subirán -como hasta ahora- dos equipos a la Primera División, y así comenzar con 18 clubes el siguiente curso.