La Ligue-1 pone cifras a su proyecto de futuro junto a CVC. En un proceso similar, aunque más tardío que el de LaLiga, la liga francesa aspira a crecer junto al fondo británico, que inyectará 1.500 millones en los clubes galos, muy afectados por la pandemia y el roto audiovisual del anterior ciclo. Por ello, el presidente de la gestora del fútbol profesional francés (LFP), Vincent Labrune, destaca en una entrevista en L’Équipe que la competición confía en alcanzar los 1.600 millones de ingresos anuales a partir de 2027.
Más a corto plazo, en septiembre sacará a concurso el tender del próximo ciclo audiovisual (2024-2027), en el que ya confía en acercarse a los 1.000 millones por televisión, apoyado en un esperado crecimiento en el extranjero, por donde ya anunció Labrune que confían en facturar 200 millones. Actualmente, su acuerdo con beIN Media Group –que forma parte del holding catarí propietario del PSG– para los mercados internacionales es de 80 millones por temporada. De todo este previsible negocio al alza, CVC se quedará con un 13%.
En este sentido, cabe destacar el acuerdo con rEvolution para crecer en Estados Unidos, la llegada de la Supercopa de Francia a Tailandia –aunque Labrune apunta a un mayor interés de la Federación que de la LFP en este acuerdo– y, sobre todo, la reducción de equipos a 18 clubes en Ligue-1 y otros tantos en Ligue-2 a partir de 2024-2025. Un punto clave y que responde a la necesidad de “reducir el reparto de los ingresos”, según explicó Labrune hace ya dos años.