Uno de los grandes hándicaps a los que antaño se enfrentaban los clubes grandes cuando caían de Primera a Segunda División era rediseñar toda su estructura, partiendo por la económica y que condicionaba directamente la deportiva, para poder acometer el asalto de volver a la élite cuanto antes. Hoy, ese rompecabezas es menos dañino para los directivos de los equipos descendidos, ya que LaLiga repartirá este 2020-2021 ayudas récord. Hasta 61,5 millones de euros a repartir entre los tres equipos que cayeron a LaLiga SmartBank y los cuatro que juegan este curso en Segunda B, según la documentación a la que ha accedido 2Playbook.
Entre ellos destaca el RCD Espanyol, que se llevará 30,1 millones de euros de ese total presupuestado para encarar el ascenso a LaLiga Santander con todas las garantías este curso. El CD Leganés y el RCD Mallorca, por su parte, recibirán 15,8 millones y 9,6 millones de euros, respectivamente, en su retorno a LaLiga SmartBank. En total, 55,5 millones para los ex Primera. A fondo perdido, pues no tienen que devolverlos si logran su objetivo en los años venideros como sucedía con el anterior modelo.
Fuentes de la industria señala que todavía existen remanentes de ejercicios anteriores en ese fondo de ayudas al descenso, pero la duda es si será capaz de hacer frente a todas sus obligaciones si continúan perdiendo la categoría históricos. Especialmente a partir de 2020-2021, después de que el Gobierno y la Rfef forzaran a LaLiga a destinar más dinero al fútbol aficionado y el resto del deporte español en detrimento de la hucha para este paracaídas.
En concreto, la modificación del Real-Decreto ley que regula la venta de los derechos audiovisuales ha rebajado del 3,5% al 2,5% el dinero reservado al fondo de compensación. Sólo es un punto porcentual, pero en términos absolutos supone pasar de casi 60 millones a unos 42 millones de euros para atender a los equipos de fútbol que pierden la categoría y necesitan esa ayuda extra.
¿Y por qué el Espanyol se llevará el triple que el Mallorca? La respuesta se encuentra en la trayectoria de cada uno. Los pericos acumulaban 25 años de fidelidad ininterrumpida a Primera División, lo que le permitirá cobrar el máximo a percibir -el límite casualmente se fijó en ese cuarto de siglo-. Cada club recibe un 0,35% de los ingresos por televisión de Primera, descontadas todas las obligaciones; un 20% de la factura media por retransmisiones que hayan cobrado en los últimos cinco años; un 5% de sus ingresos totales medios de los últimos cinco ejercicios, incluidas las plusvalías por traspasos, y, finalmente, un 0,035% de los ingresos netos por televisión de Primera por cada temporada que hayan militado en LaLiga de forma consecutiva, con ese máximo ya mencionado de 25 años.
“Cada vez se va a poner más complicado competir con los equipos que caen de Primera”
El sistema actual, puesto en marcha en 2017-2018, ha permitido en los últimos años a los clubes descendidos respirar algo mejor ante la caída, pero ha diferenciado más a estos respecto a los que ya llevan tiempo en la categoría de plata. Cabe recordar que hasta hace no mucho las directivas, y principalmente de los equipos históricos, hacían un sobresfuerzo en el primer curso en Segunda, pero si no se ascendía esa temporada, el golpe era doble o triple. Ejemplos hay actualmente en LaLiga SmartBank por doquier.
“Cada vez se va a poner más complicado competir con los equipos que caen de LaLiga Santander”, admitía este verano el director general de un histórico de Segunda a 2Playbook. Gracias a esta ayuda extraordinaria, el Espanyol, por ejemplo, acometerá el ascenso a LaLiga Santander en 2020-2021 con 72,5 millones de euros de presupuesto, un récord en la categoría e incluso más que algún Primera como la SD Eibar o el Cádiz CF, tal y como adelantó 2Playbook.
El Mallorca, por su parte, afronta la temporada en Segunda con unos ingresos de algo más de 23 millones, y el Leganés, que no ha dado a conocer su cifra de negocio estimada para este curso, estará previsiblemente en un escenario parejo al bermellón.
No obstante, la ayuda al descenso es crítica en su techo de gesto y en que vayan tan destacados actualmente en la categoría: el Espanyol es líder, con el Mallorca empatado a puntos, y el Leganés les sigue de cerca, quinto, en puestos de play-off de ascenso.
Cabe recordar al respecto que varios de los clubes que han percibido las ayudas al descenso de LaLiga han logrado posteriormente el ascenso, como el Granada CF, el CA Osasuna y la SD Huesca, mientras que el Girona FC y el RC Deportivo se quedaron a las puertas del ascenso en las últimas dos campañas, cayendo en el partido decisivo del play-off ante Elche CF y Mallorca, respectivamente.
Para 2020-2021, el límite salarial de los tres clubes descendidos está entre los más altos de la categoría. Sólo se les entromete la UD Almería, con su presupuesto récord de 28 millones de euros para esta temporada, con 27,6 millones de euros. El Espanyol es líder destacado entre los equipos de Segunda con 45,3 millones de euros -superando a seis clubes de Primera-, mientras que el Leganés tiene 26,7 millones para gastar, mientras que el Mallorca cuenta con un tope salarial de 19 millones.
En las últimas campañas, las ayudas han sido notablemente inferiores: en 2019-2020, con unos ingresos totales de 1.612,62 millones de euros, LaLiga aportó la mitad que en el presente ejercicio, 31,9 millones de euros; algo más en 2018-2019, hasta 47,6 millones; mientras que en la temporada inaugural de este paracaídas (2017-2018), la aportación fue de 33,5 millones. Eso sí, no se trata de querer ayudar más o menos en función del año, sino que es un importe que se calcula automáticamente en función de qué clubes se ven afectados.
El Dépor se llevará 1,25 millones, como el resto
En LaLiga SmartBank la aportación es igual para los cuatro clubes que abandonan el fútbol profesional. En 2020-2021, con un histórico como el RC Deportivo por medio, la ayuda asciende a 1,25 millones de euros, para un total de 5 millones de euros. En este caso, se destina para los equipos que descienden a Segunda B el 10% del fondo de compensación de esa temporada.
Así, además del Dépor, el CD Numancia, el Real Racing Club de Santander y el Extremadura UD percibirán esta campaña el mismo importe, muy inferior al que se ha llevado el Espanyol pero igualmente grato para los equipos que se tienen que batallar en el barro de Segunda B en este curso tan incierto y complicado para las categorías del fútbol no profesional.