Italia también recula en sus medidas antiCovid en el deporte. El Gobierno transalpino, uno de los pocos que aún mantenía un límite, del 75%, en la capacidad de los estadios, ha decidido reducir al 50% los aforos en la Serie A y todas las competiciones profesionales que se disputen al exterior. En los pabellones, la capacidad se reduce hasta el 35%.
La medida, que entrará en vigor el próximo 6 de enero, con la vuelta de las competiciones tras el parón navideño, responde al notable repunte de contagios que sufre el país por la variante Ómicron. Con ello, Italia se suma a España, que este miércoles decidió rebajar los aforos en LaLiga al 75%, y a Francia, que anunció que limitará los aforos a 5.000 espectadores en la Ligue-1. Esta última medida, sin embargo, podría modificarse por un porcentaje respecto al aforo total de los estadios tras las criticas vertidas por los clubes y la LFP.
Este cambio en la normativa de aforo también impactará a otras disciplinas con gran seguimiento en el país transalpino como el baloncesto o el voleibol. En el deporte de la canasta, un gran equipo como el Armani Milán de la Euroliga deberá adaptarse a este ajuste del aforo al 35%, una medida más restrictiva que la acometida por España con la ACB (50%), pero más flexible que la francesa, que -por ahora- apenas dejará entrar este enero a 2.000 personas en los pabellones.
Más allá del aforo, Italia mantiene las medidas ya instauradas para los aficionados, que deben presentar un pasaporte Covid -o pase verde como se denomina allí- con el que demuestren que se han vacunado. Además, todos los jugadores profesionales deberán haberse vacunado para participar en las competiciones nacionales.