Ironman no frena su ritmo tras la pandemia y apuesta por una optimización de eventos para seguir creciendo. La promotora de triatlones y otras pruebas de resistencia cerró 2022 con un incremento del 20% de su facturación en el sur de Europa (España, Andorra, Italia y Portugal), lo que supone unos ingresos de 24 millones de euros en este mercado, según explica a 2Playbook, Agustí Pérez, director de la compañía en esta región. Asimismo, Ironman cerró el ejercicio con unos beneficios de 10 millones de euros en estos países y prevé una cifra de negocio un 5% superior para 2023.
La compañía prácticamente recupera en este mercado las cifras que alcanzó en 2019, cuando la facturación fue de 25 millones, de los que 11 millones de euros procedían de España. Ahora el peso del mercado nacional se encuentra en torno al 55% en la región, lo que supone alrededor de 13 millones de euros. Para mantener estas cifras al alza, Ironman ha renovado su acuerdo con el Ayuntamiento de Calella hasta 2027 y, tanto la prueba de larga distancia como la 70.3, seguirán celebrándose en la provincia de Barcelona durante las cuatro próximas ediciones.
Reestructuración del portfolio de eventos
Más allá del crecimiento experimentado en la cifra de negocio en el último año, el circuito también ha sufrido una caída de participantes en algunas de sus pruebas, lo que le ha llevado a replantearse su estructura de eventos en todo el mundo. Por ello, Ironman anticipa una reestructuración de su portfolio de eventos de tal manera que algunas citas desaparezcan del calendario y se incorporen nuevas ciudades o territorios.
“El objetivo es sacar el máximo provecho porque vemos que el mercado se ha desacelerado tras la pandemia, e intentar tener eventos donde podamos acoger a los participantes que ahora tenemos. Se trata de una optimización, y en ello también se incluye la posibilidad de llegar a ciertos países en los que aún no hay representación”, asegura Pérez.
El Ironman más internacional
La capacidad de organización en el territorio es fundamental para asegurar la permanencia durante muchos años de un evento en el calendario de Ironman. Por ello, el directivo añade que “ubicar un evento de estas características en el mejor lugar posible es muy difícil. Necesitamos un gran poder de comunicación, contar con aeropuertos cercanos como lo son tanto el de Barcelona como el de Girona, unas condiciones turísticas adecuadas y tener esa fluidez para poder recibir a los participantes”.
En este sentido, la prueba catalana, a poco más de una semana de su celebración, ya disponía del 90% de los montajes necesarios instalados. En total, son más de 600 personas las que están involucradas en la organización de las dos carreras de resistencia en el que está considerado como el segundo corte viario más importante de Cataluña.
En cuanto al gasto organizativo, en los eventos de Ironman el desembolso para las pruebas de larga distancia es cercano a 1,5 millones de euros, mientras que el de las pruebas 70.3 se encuentra alrededor de 700.000 euros. Como el Ironman y el Ironman 70.3 de Barcelona se celebran conjuntamente, el desembolso se sitúa en torno a dos millones de euros. “Usamos una misma infraestructura, por lo que se economiza y se gestionan los recursos disponibles y no se tiene que pagar el doble de todo”, agrega. En cuanto al peso de las instituciones en el presupuesto de organización, este no supera el 5%. Se trata de un contrato sin dinero en el que se incluye la organización de aspectos relacionados con la seguridad o la presencia de policía, entre otros.
Como el Ironman y el Ironman 70.3 de Barcelona se celebran conjuntamente, el desembolso se sitúa en torno a dos millones de euros
De cara a la edición de este fin de semana, la prueba repite su récord de participantes con más de 5.200 triatletas procedentes de 83 nacionalidades distintas. El directivo indica que “no deja de sorprendernos que en un entorno en el que la pandemia ha hecho mella en la participación en carreras populares, lográramos cerrar las inscripciones hace seis meses con récord de participación en las dos distancias”.
De hecho, la presencia de atletas internacionales, que ya de por sí es una de las particularidades de todas las pruebas Ironman, se magnifica aún más en la que se disputa entre Calella y Barcelona puesto que hasta el 91% de los participantes son extranjeros. Además, por cada triatleta acuden 2,5 acompañantes, lo cual supone un aliciente para el turismo de la zona y que multiplica el impacto económico que la carrera deja en la región. Este se cifra en 15 millones de euros según los cálculos de Ironman.
Qatar Airways pone nombre al Ironman de Barcelona
La principal novedad en el apartado comercial es la firma de Qatar Airways como title sponsor del Ironman Barcelona para esta edición, tal y como informó 2Playbook. El acuerdo hace referencia a la prueba Ironman, y no a la Ironman 70.3, que de momento se mantiene sin un patrocinador principal que posea los naming rights.
De este modo, la prueba pasa a llamarse Qatar Airways Ironman Barcelona. La aerolínea catarí se había incorporado al pool de patrocinadores globales del circuito de pruebas de resistencia en 2022 y ahora también da el salto como el patrocinador principal de uno de sus principales eventos en Europa, siguiendo así la estrategia de acuerdos globales del grupo.
De este modo, el circuito distribuye sus patrocinadores en todo el mundo como principales partners de todas sus pruebas, en lugar de que estas tengan que buscar sus propios patrocinios nacionales o locales. Así las cosas, alrededor del 20% de los ingresos de un Ironman proceden del negocio comercial.
Más allá del triatlón, Ironman ha ido aumentando su cartera de competiciones durante los últimos años, ganando terreno en disciplinas como el ciclismo, el running y el trail. Esto ha llevado a la compañía a organizar más de 300 eventos en más de 50 países cada año. En 2021, el grupo se hizo con la 4 Islands MTB Stage Race en Croacia, las series de ciclismo Haute Route y Gravel Epic o la app de ciclismo indoor Fulgaz.
Entre las modalidades de mayor potencial destaca el trail en el que posee UTMB Group, la mayor promotora de carreras a pie en montaña. Tras su compra, puso en marcha las UTMB Series, el circuito internacional de la disciplina que ya cuenta con un calendario de alrededor de cuarenta pruebas a lo largo del año, más de la mitad de las cuáles se disputan en el continente europeo.