El Gran Premio de España de Fórmula 1 se celebrará finalmente sin público. El Circuito de Barcelona-Catalunya inciará próximamente el reembolso del dinero a los aficionados que habían comprado su entrada, después de que la Generalitat anunciara que en principio sí podría haber espectadores en las gradas.
En marzo, el Ejecutivo autonómico anunció que se permitía desde el día 15 de ese mes la reapertura de recintos deportivos al aire libre con un aforo máximo del 50%, y del 30% para los pabellones. Esto beneficiaba al el Barcelona Open Banc Sabadell de tenis, y los grandes premios de Fórmula 1, MotoGP y Superbike.
Sin embargo, el Procicat, ente de la Generalitat que adopta las medidas para contener la Covid-19, se opone. En su opinión, la carrera automovilística “no se puede llevar a cabo en las condiciones previstas en el protocolo de acceso al público”, dado que la resolución vigente para contener el brote epidémico tiene vigencia hasta el día 26 de abril.
Dicho de otro modo, “no se puede determinar con total certeza si los días 7, 8 y 9 de mayo la situación epidemiológica y asistencial permitirán avanzar en la flexibilización de medidas, que restringe también la movilidad a nivel comarcal y que, por tanto, harían inviable el desplazamiento de los aficionados de fuera de la comarca del Vallés Oriental”.
Ahora está por ver cómo afectará este hecho a la relación del circuito con Formula One Management (FOM), que el año pasado liberó a los trazados de abonar el canon ante la imposibilidad de recuperarlo vía ticketing. En el caso de Cataluña, la Generalitat paga más de 20 millones de euros por edición.