La Fórmula 1 sigue creciendo y supera los 2.500 millones de facturación. El Mundial de Automovilismo cerró 2022 con unas ganancias de 562 millones de dólares (530 millones de euros) y vuelve a la senda de la rentabilidad tras un 2021 en el que registró pérdidas de 120 millones de dólares (113 millones de euros).
En cuanto al beneficio operativo, este se ha situado en 163 millones de dólares (153 millones de euros), más de cinco veces más que las ganancias operativas obtenidas en 2021 y que contrasta con los números rojos de 444 millones de dólares (393 millones de euros) que sufrió en 2020, cuando el Mundial se disputó con menos grandes premios y sin fans en las gradas. La vuelta a la rentabilidad responde a la recuperación de la normalidad en el campeonato de F-1, lo que se tradujo en una facturación de 2.573 millones de dólares (2.427 millones de euros), un 20% más que en la temporada anterior.
Los ingresos ordinarios de la F1 crecieron durante todo el año con aumentos en todas las líneas de negocio. Las ventas procedentes de los cánones que pagan los circuitos por albergar los grandes premios aumentaron, debido a que se aumentó el fee y se celebraron tres carreras más fuera de Europa en comparación con la temporada anterior. Los fees que pagaron los circuitos ya suponen el 28,6% de los ingresos totales de la Fórmula 1: 735,9 millones de dólares (691,7 millones de euros).
Los ingresos por derechos audiovisuales también aumentaron durante todo el ejercicio y se mantienen un año más como la principal fuente de ingresos de la Fórmula 1. Este incremento responde al crecimiento de los ingresos de suscripción de F1 TV y al aumento de los ingresos gracias la firma o renovación de acuerdos por los derechos de emisión del campeonato. En total, supone el 36,4% del negocio total de la competición, lo que significa alrededor de 936,6 millones de dólares (880,3 millones de euros).
De hecho, la promotora del campeonato también ha especificado los datos de emisión del pasado curso: 1.540 millones de espectadores acumulados, con un crecimiento del 36% en los Estados Unidos, uno de los mercados emergentes y clave en la expansión del campeonato. Los datos globales son ligeramente inferiores a los de 2021, cuando se llegaron a los 1.550 millones de espectadores acumulados. En redes sociales el auge ha sido del 23%, hasta alcanzar la cifra de 61 millones de seguidores en las diferentes plataformas.
Además, la Fórmula 1 ha registrado un nuevo récord de asistencia de 5,7 millones de espectadores a lo largo de los 22 Grandes Premios disputados, lo que supone un 36% más que en 2019, última temporada previa a la Covid-19 sin ninguna limitación de aforo.
El patrocinio también mejoró en 2022 básicamente por la firma de nuevos acuerdos. Esta línea de negocio, que supone un 16,9% del total de la facturación de la F-1, generó 434,8 millones de dólares (408,7 millones de euros). El 22,1% restante del negocio, en torno a 466 millones de dólares (439,5 millones de euros), corresponde a los ingresos generados en el paddock vía hospitality, que también crecieron debido a que el servicio de hospitality del campeonato, Paddock Club, estuvo presente en 19 de los 22 grandes premios, ocho más que en 2021.
Liberty Media también es propietario de los Atlanta Braves de la MLB de béisbol, que generaron unos ingresos totales de 588 millones de dólares (554,6 millones de euros), un 3,5% más que el curso anterior pese a registrar unas pérdidas de 15 millones de dólares (14,15 millones de euros).
