La Fórmula 1 se alía con Unicef en un acuerdo en pro de los derechos de los niños. La dueña de la competición de Automovilismo ha firmado a la organización como socio solidario durante los próximos tres años con el objetivo de mejorar el acceso de los niños en situación de vulnerabilidad a una educación de calidad. Para ello, la F1 apuesta por mejorar el acceso digital de los niños a la educación y reforzar la respuesta humanitaria.
Como parte del acuerdo, el Mundial de automovilismo contribuirá a expandir el Learning Passport de Unicef, una plataforma digital portátil que permite a los niños continuar aprendiendo en línea y fuera de línea. Esta plataforma tiene presencia en 26 países, y el objetivo de la F1 es llegar a 19 países más.
Por otro lado, el campeonato también dará apoyo a los esfuerzos de respuesta humanitaria de emergencia de la agencia de derechos del niño a través de una donación a su fondo de emergencia, de la que se desconocen las cifras. La gestora del campeonato estima que con esta colaboración ayudará a unos 6,5 millones de niños de comunidades vulnerables y marginadas a acceder a una educación de calidad.
Stefano Domenicali, consejero delegado de la Fórmula 1, ha señalado que “en un deporte donde la investigación, la tecnología y la innovación juegan un papel vital en el éxito del piloto y del equipo, la educación es el núcleo de la Fórmula 1”.
Por su parte, John Sparkes, director ejecutivo del Comité Pro de Unicef del Reino Unido, ha explicado que “En Unicef, creemos que los deportes juegan un papel único uniendo a las personas, ayudándonos a abordar los problemas más importantes que afectan a los niños, incluidos aquellos atrapados en emergencias humanitarias
