Mientras el fútbol no profesional espera su momento para volver a saltar al campo, David Jiménez no para. Desde ProLiga defiende los intereses de más de 240 clubes de Segunda B y Tercera, muchos de ellos con grandes incertidumbres generadas por la crisis del Covid-19, y ello le lleva de reunión en reunión. En uno de esos breves descansos, atiende a 2Playbook por teléfono para explicar cómo afrontan los clubes no profesionales la vuelta de sus competiciones, cuáles son sus necesidades más urgentes y qué reclama la patronal que preside a la Federación en este mandato 2020-2024 que ha iniciado esta semana Luis Rubiales y su equipo.

Empiezo por lo más reciente, la Asamblea General de la Rfef. No pudisteis estar presentes, según denunciasteis, porque os excluyeron de “forma arbitraria”. ¿Habéis tomado o tenéis pensado tomar alguna medida al respecto?

Sí, recurrimos la decisión ante el CSD, que aún no ha dictado resolución. Es curioso que la nueva asamblea esté conformada sin esperar a esta decisión.

¿Una resolución favorable de su recurso podría traer consecuencias?

Podría ser, sí…

Tampoco os pareció correcta la forma de proceder de la Federación en el proceso electoral.

Hay cuestiones que deben ser revisadas. Las elecciones fueron convocadas en pleno estado de alarma y con poca flexibilidad para la presentación de candidaturas. No se daban las circunstancias idóneas para disputar unas elecciones, como ya explicó Iker Casillas.

¿Qué supone para ProLiga la continuidad de Luis Rubiales?

Hemos sido críticos con la Federación en algunos ámbitos porque esperamos una gestión diferente por su parte. Nosotros defendemos los intereses del fútbol no profesional, y en ese ámbito creemos que hay mucho por hacer y que se puede hacer. Ahora, nuestras reclamaciones también las puede hacer el propio Luis Rubiales. Ojalá.

¿Cuáles son vuestras principales reclamaciones?

La fundamental es que cuente con los clubes en las decisiones que afectan al fútbol no profesional. Nosotros, como patronal, queremos estar en las mesas de decisión. Actualmente existen comisiones, pero en las que los clubes no están bien representados ya que sus integrantes no los eligen esos clubes no profesionales. Además, creemos que como Federación pueden hacer fuerza para la activación de una regulación laboral para este fútbol, que se apoye y contribuya al mismo con un porcentaje de las retribuciones por apuestas y por los derechos audiovisuales.

"Como patronal, queremos estar en las mesas de decisión sobre el fútbol no profesional: actualmente, existen comisiones, pero en ellas no están bien representadas los clubes"

¿Qué opinas del acuerdo entre CSD, Federaciones y comunidades autónomas para el regreso de las competiciones no profesionales y qué impacto va a tener en los clubes?

Una primera muy buena noticia en este acuerdo es que el CSD nos recibió en una reunión en la que participaron otros grandes organismos del fútbol. Allí pudimos poner encima de la mesa nuestras preocupaciones. El plan es razonable y considero que está bastante bien, aunque nos gustaría que se hubieran establecido ayudas al fútbol no profesional para que pueda cumplir con el reglamento. Porque hay algunas cuestiones que podrían traer problemas a los clubes, como las derivadas de cuando se detecta un positivo: se insta a hacer pruebas al resto del equipo y cuerpo técnico, y los clubes no tienen recursos suficientes para poder pagar todos los test. En Segunda B, todavía puede que algunos sí tengan capacidad, pero en Tercera, casi ninguno.

¿Habéis estimado el coste que va a tener para cada club las medidas antiCovid?

Hicimos un análisis cuando se hizo pública la medida de realizar test 72 horas antes de cada competición. Según nuestros cálculos, cumplir con ello podría costarle hasta 100.000 euros (100 euros por PCR) a un club de Segunda B y Tercera.

Durante el confinamiento, la Federación anunció subvenciones de hasta 4 millones de euros para el fútbol modesto. ¿Se sabe si ese dinero ha llegado a los clubes?

Está claro que al corto plazo puede valer, como un crédito ante necesidades urgentes. Pero con ello no dejas de endeudarte, con lo que eso también preocupa por si no se puede devolver después. Además, para solicitarla, hay que seguir una serie de requisitos que no es fácil de cumplir al 100%.

En La Liga se habla ya de pérdidas millonarias por la falta de público en las gradas. En el fútbol modesto, ¿este impacto de cuánto es? ¿Qué supone prescindir de estos ingresos?

En el fútbol no profesional hay que tener en cuenta que hay una variación importante entre un Cultural y Deportiva Leonesa, por poner un ejemplo, y un equipo de Tercera. Pero, para todos, el hecho de no poder introducir gente en el campo es un lastre, puesto que, además de perder ingresos por taquilla, tampoco se hace socia la gente si no tiene partidos que ver. Tampoco puedes explotar bares o cafeterías de las instalaciones, ni vendes publicidad estática… El impacto, por tanto, es muy importante, puede llegar a ser del 50% en el presupuesto de un club.

Hace pocos días once clubes reclamaron a la Federación un mayor control del fair play financiero, hablando incluso de “competencia desleal”. ¿Por qué no está implantado aún?

Cuando entré como presidente de ProLiga (en el verano de 2018) lo primero que dije fue que hay que profesionalizar la Segunda B y Tercera, pero cuando digo profesionalizar, me refiero también a controlar y evitar que se incurran en responsabilidad subsidiarias por una mala gestión. Hay que cumplir con lo que la normativa legal marque, por supuesto, pero hay que ayudar a los clubes para que tengan recursos para que se hagan las cosas bien. En ProLiga hemos dado formación fiscal a los clubes para que puedan llevar a cabo bien la gestión.

"Cumplir con la norma de realizar test PCR 72 horas antes de cada partido supondría un coste de 100.000 euros para los clubes de Segunda B y Tercera; una cifra en estas categorías"

¿Pero cómo haces para que se lleve a cabo bien esta buena gobernanza si buena parte de los clubes no están preparados para poder firmar un convenio colectivo y cumplir con el control financiero?

Hay que analizar despacio este punto. En Tercera, la actividad principal de los futbolistas no suele ser el fútbol. Si un jugador de Tercera cobra, pongamos, 400 euros al mes y el club le da de alta de la SS, pero después el jugador tiene una rotura de fibras, el club le da de baja, y ahí tiene un problema. Porque, en ese momento, se le da de baja también en su trabajo principal. O si coge su permiso de paternidad en su trabajo principal, no puede cobrar del fútbol. Hay en otros países ejemplos de flexibilidad, en los que, hasta cierta cantidad, hay exenciones o alternativas fiscales que se pueden estudiar en España. En resumen, hay que conocer bien el contexto para poder trabajar en la evolución en la gestión de los clubes.

Sin público, menos ingresos por publicidad, y con el coste de los test… ¿cómo se sale de ésta?

Esta pregunta hay que trasladársela a la Federación, que es suficientemente importante y fuerte como para poner mecanismos que permitan atajar la situación. Por ejemplo, en la comercialización de los derechos audiovisuales de Segunda B y Tercera, ¿cuál es el proyecto que pondrá encima de la mesa para la explotación televisiva esta temporada? Si es que va a proponer algo. Si no es así, en ProLiga intentaremos poner encima de la mesa ese plan para la explotación audiovisual.

En la Asamblea de la Federación, Rubiales dijo que los ingresos generados con la Supercopa de España “han mantenido estable al fútbol no profesional”. ¿Estás de acuerdo?

Antes de nada, cabe recordar que la mayor parte del dinero que percibe el fútbol no profesional llega de los derechos de televisión del fútbol profesional. Por otro lado, a mí me gustaría también saber en la explotación de la nueva Copa del Rey, cuánto dinero salió de ahí para los clubes no profesionales, y si ese dinero es mayor o menor que cuando lo comercializaba LaLiga.

Cuando la encomienda la tenía LaLiga daba un 1%, ahora es del 10%. Pero, ¿consiguió los 14 millones de euros que daba LaLiga por el paquete audiovisual que comercializaba? En ese sentido, también prometió la Federación que iba a aportar entre un 4,7 y 4,9% del dinero para los clubes de Segunda B y Tercera, pero ahora hay más clubes que hace un año, y parece que van a dar el dinero de manera proporcional.

La última: ¿los clubes de Segunda B y Tercera podrían soportar financieramente otro retraso en el inicio de las competiciones?

Es un tema delicado. Los equipos ya están entrenando, y un club no se puede permitir estar cuatro o cinco meses pagando a su plantilla sólo por entrenar. Necesitan generar ingresos cuanto antes porque, ahora mismo, están incurriendo principalmente en costes.