El Consejo Superior de Deportes (CSD) podría anticiparse a la decisión que todo el fútbol español esperaba en los juzgados. El organismo presidido por Irene Lozano ha decidido avalar un nuevo escenario para las jornadas del fin de semana, en el que la gran novedad será reservar la mañana de sábado y domingo para el fútbol femenino y el semiprofesional (Segunda B y Tercera División). La entrada en vigor de los cambios se aplicará ya en la jornada 7, prevista para el próximo fin de semana.

A cambio, LaLiga se garantiza que podrá iniciar las retransmisiones a partir de las 14:00 horas, mitigando el impacto que renunciar al matinal iba a suponer en el valor de los derechos audiovisuales en Asia. Además, como adelantó Cuatro, podrán programarse partidos todos los viernes y en un máximo de veinte jornadas para los lunes.

Sobre los lunes, la orden señala que “el uso de este día de la semana como hábil para la competición se orientará principalmente a la reprogramación o recuperación de jornadas completas o partidos eventualmente aplazados o suspendidos por motivos sanitarios relacionados con la pandemia de COVID 19 u otras eventualidades”.

El CSD justifica ligar ambos mundos en su resolución, hecha pública a primera hora de la tarde, porque “resulta evidente –al tratarse de competiciones intrincadas- que las normas de celebración de unas afectan al desenvolvimiento de las otras, y por ello cualquier decisión que introduzca flexibilidad en los horarios del fútbol profesional debe proteger también el fútbol femenino, el federado no profesional y el fútbol de base”.

El caso se remonta al año pasado, cuando la gestora del fútbol profesional y la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) iniciaron una batalla legal sobre las competencias para definir qué días de la semana podían disputarse partidos. LaLiga depositó 15 millones como garantía para que se continuara jugando los viernes en 2019-2020, pero se renunció al lunes, y en el inicio de 2020-2021 no se estaba disputando partidos en estos días de la semana.

El organismo atribuye su decisión “constatada la persistencia de las discrepancias” de las dos entidades “sobre la competencia para determinar la admisibilidad de los lunes y los viernes para celebrar los partidos de fútbol de competición profesional”. Además, para sostener la validez legal de su decisión, recuerda que son atribuciones que le vienen dadas en el convenio que regula la relación entre LaLiga y la Rfef desde 2019 y el Real Decreto sobre federaciones deportivas de 1991.

La resolución del CSD es definitiva y las dos organizaciones tan solo podrán interponer recurso contencioso-administrativo en el plazo de dos meses a contar desde la notificación de esta decisión. Es decir, que los recursos, de no producirse, deberán llegar antes de que finalice el año.