Dos años después de que Gerard Piqué consiguiera el “sí” de las federaciones internacionales de tenis para revolucionar la Copa Davis y convertirla en un Mundial con fase final en una única sede durante una única semana, el torneo se amplía y recupera la tradicional multisede para favorecer la generación de negocio. La gestora fundada por el futbolista, Kosmos Tennis, ha recibido el visto bueno de la Federación Internacional de Tenis (ITF) para ampliar la cita a 11 días, disputándose durante dos fines de semana y en tres sedes europeas que acompañarán a Madrid, como ya adelantó 2Playbook.

La Caja Mágica será la sede de la final, las semifinales, los cuartos de final y la fase inicial de dos de los seis grupos de la competición. España, enmarcada en el grupo A, jugará en casa ante Rusia y Ecuador. El grupo B, en el que están Canadá, Kazajistán y Suecia, también jugarán en Madrid.

La cita se celebrará del 25 de noviembre al 5 de diciembre y, aunque aún no han trascendido las otras dos ciudades que albergarán las fases iniciales, Kosmos está en negociaciones para encontrar las sedes. La única confirmada es Madrid, que en 2018 firmó el contrato para las ediciones de 2019 y 2020, aunque esta última no pudo organizarse debido a la Covid-19.

La previsión era que en 2021 el torneo cambiara de sede y presumiblemente viajara a Estados Unidos, donde el Indian Wells Tennis Garden estaba bien posicionado para hacerse con la cita. Sin embargo, el Covid-19 obligó a aplazar la edición de 2020 a 2021, y, aunque el contrato con Madrid no incluía una cláusula de prórroga automática en caso de cancelación, finalmente Kosmos ha alcanzado un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid y el Gobierno Autonómico, como ya adelantó este medio.

Kosmos Tennis asignó la Copa Davis a Madrid para 2019 y 2020 a cambio de 24 millones anuales

El acuerdo anterior establecía 22 millones de euros anuales aportados a partes iguales por el consistorio y el Gobierno autonómico, y dos millones de euros adicionales aportados por Ifema. Se desconoce por cuánto se ha firmado el acuerdo para 2021, ya que Madrid ha perdido la exclusividad para albergar la fase final. El objetivo es llevar la cita a otras ciudades y contribuir a mejorar la experiencia del aficionado en cuanto estos puedan volver a las gradas. Además, al llevar la cita a otras sedes se busca generar más negocio a través del canon que pagan las ciudades. La firma de nuevos acuerdos de patrocinio y el tener más posibilidades de llenar las gradas cuando se supere la Covid también pesa en esta decisión.

Este es uno de los puntos marcados en rojo por Kosmos Tennis, puesto que en la última edición se disputaron partidos con poca entrada y de madrugada. La gestora cree que distribuyendo algunos partidos de la fase final en algunos de los países que disputen dicho torneo se conseguiría una mayor adhesión del fan, lo que contribuiría al espectáculo.

“Los torneos más exitosos se adaptan y evolucionan con el tiempo, y si bien las finales inaugurales de la Copa Davis brindaron un tenis fantástico, también brindaron algunos aprendizajes. Estamos comprometidos con una visión a largo plazo para esta competición histórica y confiamos en que estos ajustes mejorarán la experiencia de los jugadores y aficionados”, ha explicado el director de las Finales, Albert Costa.

Otra de las novedades es que la fase final de la Copa Davis caerá de 18 participantes a 16 a partir de 2022. En la edición de 2021, en total la disputarán 18 equipos nacionales que competirán en seis grupos round-robin de tres equipos cada uno. Los seis ganadores, junto a los dos mejores segundos, acceden a cuartos de final, que pelean por clasificarse para semifinales y, de ahí, a la final. Por el momento Kosmos Tennis está negociando con otras potenciales sedes para albergar algunos encuentros de la round-robin, mientras que las últimas instancias del torneo sí que se jugarían en un único recinto. Madrid ha puesto a disposición la Caja Mágica, como ya lo hizo en 2019, y el WiZink Center podría ser una segunda opción.

El negocio de la ITF, al alza gracias al acuerdo con Kosmos Tennis

La Copa Davis se ha convertido en el principal generador de ingresos de la Federación Internacional de Tenis (ITF) ya que Kosmos Tennis paga un canon anual de 40,3 millones de dólares (34,2 millones de euros). Las cuentas anuales reflejan que la ITF generó unos ingresos de 88,7 millones de dólares (77,4 millones de euros) en 2019, y el 45,4% procedió del fee que pagó Kosmos. El canon que recibe la ITF es muy superior a los 24 millones de euros que la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de la capital e Ifema se comprometió a pagar a Kosmos a cambio de albergar la cita en 2019 y 2020.

La Federación admite que los ingresos por televisión y patrocinio han caído de un año para otro y los ha compensado con el fee que aporta Kosmos. De hecho, si en 2018 la ITF no facturó nada a través del canon, sí que generó ingresos por 33,9 millones de dólares (28,8 millones de euros) por espónsors y socios audiovisuales, un importe que en 2019 cayó hasta 8,7 millones de dólares. También cayó en un millón de dólares los ingresos por ticketing, que en 2018 generaron 6,8 millones (5,7 millones de euros). ¿El motivo? Kosmos Tennis paga un canon tan elevado a cambio de asumir el negocio audiovisual, de patrocinio y de ticketing asociado a las finales de la Davis.

Más allá de estos 40,3 millones de dólares, de las cuentas de la ITF se desprende que la gestora de Gerard Piqué pagó directamente a los jugadores 18 millones de dólares (15,3 millones de euros) directamente a los jugadores que participaron en la Copa Davis en concepto de prize money o premio económico.

Además, la ITF recibió otros 25 millones de dólares (21,2 millones de euros) por las garantías que exigen el acuerdo de licencia con Kosmos. La gestora paga esta cantidad como depósito de seguridad en caso de incumplimiento o rescisión de contrato. Este dinero no se anota como ingreso, sino que se mantiene como efectivo restringido y no está incluido en el estado de flujo de caja.

Como parte del pacto de la ITF con las federaciones nacionales que participan en la Copa Davis y que apoyaron su renovación, el organismo se comprometió a repartir parte del canon entre las federaciones miembro para que desarrollen la práctica y la tecnificación del tenis en sus respectivos países. Como resultado, el gasto en tenis profesional se incrementó hasta 50,1 millones de dólares (42,6 millones de euros), un 35% más. En concreto, repartió 8,7 millones de dólares (7,4 millones de euros) entre los países que participaron en la Davis, por los 3,4 millones de dólares (2,8 millones de euros) a distribuir entre las selecciones de la Copa Federación, la Davis femenina, que dobló su reparto económico en 2019.