Limites y rebajas salariales en los principales clubes de fútbol, renegociación del convenio colectivo en la MLB, la MLS y la NHL, grandes competiciones pidiendo recortes presupuestarios por la puerta cerrada… Son varias las fórmulas que está empleando el sector deportivo para hacer viable su actividad tras la Covid-19, y la ATP no se ha quedado atrás. Según ha podido saber 2Playbook, el principal circuito internacional de tenis ha pactado con los propietarios de los torneos y los jugadores rebajas en los premios económicos para hacer viable su organización. Los recortes oscilan entre el 20% y el 60% en función del aforo y del número de entradas vendidas en comparación con 2019, la temporada pre-Covid.
Así se recoge en el libro de normas que cada temporada actualiza la ATP y cuya actualización en el prize money es el resultado de varios meses de conversaciones con todos sus stakeholders: desde los clubes que albergan las citas hasta las gestoras de competiciones, pasando por los tenistas, los medios y los patrocinadores.
La nueva norma establece un método de cálculo de la reducción de los premios económicos para las tres categorías de torneos ATP: Masters 1.000, ATP 500 y ATP 250. En 2021, España albergará cuatro citas, por lo que este rulebook es de vital importancia para el Mutua Madrid Open, el Barcelona Open Banc Sabadell, el AnyTech365 Andalucía Open y el Mallorca Championships.
La norma distingue entre Masters 1.000 y el resto de categorías, aunque en ambos casos no habrá recorte si se puede albergar público sin limitaciones. En el primer nivel, los premios se reducirán un 50% si no se puede jugar con aficionados en las gradas; en el caso de que el aforo se limite a la mitad de los asientos, la caída en el prize money será del 40%, mientras que si se ocupan más de la mitad de las butacas el recorte será del 20%.
El prize money del Mutua Madrid Open caerá un 40% si se juega con un aforo inferior al 50%
En el caso de los ATP 500 y ATP 250, se ha pactado que el descenso de los premios en metálico vaya en función del número de entradas vendidas, lo que indirectamente está relacionado con el aforo. Por ejemplo, si el Barcelona Open Banc Sabadell vende más del 85% de los pases que registró en 2019, los tenistas cobrarán el prize money al completo.
En el caso de que se comercialicen entre el 71% y el 85% de las entradas, este reparto económico caerá un 20%, por el 40% de reducción si se ocupan entre el 61% y el 70% de las butacas que se llenaron en 2019. El recorte será del 50% en el caso de que se venda entre un 41% y un 60% de lo que se comercializó en 2019. El supuesto más pesimista es que sólo se venda hasta un 40% de las entradas, lo que permitiría a la organización reducir el prize money un 60%.
La incertidumbre sobre cuál será el aforo y los ingresos por ticketing ha provocado que la mayoría de los torneos españoles no hayan comunicado aún su bolsa de premios. En el caso del Barcelona Open Banc Sabadell se está trabajando en tres escenarios: jugar con aforo completo, algo que la organización ya ha descartado; hacerlo sólo con el acceso de los medios de comunicación para garantizar la cobertura, y poder hacerlo con aforo reducido.
Esta es la opción a la que se aferran el Tenis Barcelona y Tennium, que están en conversaciones con la Generalitat de Catalunya para plantear los distintos escenarios. Según ha podido saber este medio, ninguno de ellos contempla jugar con más de un 30% o un 40% del público, lo que provocaría que el prize money se redujera un 60%. En 2019 se repartieron en premios 2,3 millones de euros y, si el ticketing cae un 60% en 2021 respecto a 2019, la bolsa podría reducirse hasta casi un millón de euros.
El Andalucía Open es el único campeonato español que ya ha comunicado cuántos premios repartirá, con una bolsa de 255.500 euros, si bien se desconoce cómo afectará el aforo a esta cifra. Además, al ser un torneo nuevo, no tiene datos de venta de entradas con los que compararse. Mallorca también debuta, aunque iba a hacerlo el año pasado, cuando preveía repartir 900.000 euros.
En cuanto al Mutua Madrid Open, y tomando como referencia los 6,5 millones que repartió en 2019, el importe podría caer hasta 3,9 millones (un 40% menos) si se juega con la mitad del aforo. En el caso de que sea con menos público, el ajuste se mantendrá en el 40% del prize money, y sólo si se juega a puerta cerrada, perdiendo el 100% del ticketing, la bolsa de premios se recortará a la mitad.
Los gestores de competiciones consultados 2Playbook señalan que los baremos pactados con la ATP son razonables y admiten que no habría sido posible pactar una rebaja del prize money del 90% si el aforo se limitara al 10%, puesto que, de ser así “los tenistas no vendrían a jugar”.
Con estas medidas, la ATP, los jugadores y los organizadores buscan mitigar el impacto económico de la Covid-19. El circuito, que en 2020 ha mantenido el reparto económico entre los eventos a partir de los ingresos audiovisuales y de patrocinio, se ha reunido con las partes interesadas para asegurar que ningún campeonato se cayera del calendario.
“La prioridad de todos los que formamos parte del circuito ha sido normalizar el regreso del tenis”, asegura Xavier Pujol, director general del Barcelona Open Banc Sabadell. El directivo admite que los principales gastos de organización de un torneo son los de la bolsa de premios y la estructura, y asegura que “todos los miembros hemos ido a una para acordar que se reparta menos dinero allí donde se juegue con menos público”.
"Podemos permitirnos el cerrar con una ligera pérdida en la edición de este año, pero no dejarnos un millón de euros", sostienen desde una gestora de torneos ATP, sobre el consenso logrado entre las partes. Es un pacto que no habría salido adelante sin la involucración de los jugadores, que ocupan un 50% de los asientos del consejo de la ATP, donde se toman las decisiones que afectan al circuito. “El objetivo es la viabilidad y que el tenis no se detenga siempre que la situación sanitaria así lo permita”, admite Pujol.
En esta negociación no han participado los Grand Slams, puesto que no forman parte del circuito. Por ejemplo, el Open de Australia ha mantenido los mismos premios que en 2020 pese a jugar con el 50% de público. Sin embargo, todos los torneos ATP que se jugarán entre el 22 de febrero y el 14 de marzo han actualizado a la baja este importe y de media repartirán un 50,5% menos que el año anterior.
El Cordoba Open (Argentina) repartirá un 27,9% menos, mientras que el Qatar ExxonMobil Open ha reducido la bolsa un 77%, de 1,3 millones de dólares a 294.235 dólares (de 1,07 millones de euros, a 292.563 euros). ABN AMRO World Tennis Tournament, conocido también como ATP 500 de Róterdam, el año pasado premió a los tenistas con 2,1 millones de euros, por los 980.580 euros previstos para este año (54,5%).
La previsión de la ATP en 2020 era repartir 59,7 millones de dólares (49,2 millones de euros) en premios en 2020, un 13% más que el año anterior, aunque la pandemia y la suspensión de los torneos impidieron alcanzar esta cifra.
España prepara cuatro torneos ATP para 2021
La primera parada del circuito ATP en España será el nuevo AnyTech365 Andalucía Open, que por primera vez se disputará en Marbella, en el Club de Tennis Puente Romano. El recinto ya formó parte del ATP Challenger Tour entre 2018 y 2020, y ahora ha dado un paso más para celebrar un ATP 250.
El segundo torneo en el país será el Barcelona Open Banc Sabadell, que la pasada semana confirmó las fechas para esta temporada. La cita, de categoría ATP 500, se organizará del 19 al 25 de abril en la capital catalana y supondrá el debut de Tennium como gestor de la cita, tomando el relevo de IMG.
Una semana después de la finalización de esta cita arrancará el Mutua Madrid Open, que se disputará del 2 al 9 de mayo en la Caja Mágica. Es el único torneo de la categoría Masters 1.000 que se disputa en el país. Tampoco se ha comunicado cuánto presupuesto destinará al prize money, aunque en la última edición repartió 6,5 millones de euros, mientras que la cita masculina distribuyó 7 millones de euros.
El Mallorca Championships, que sustituirá al evento femenino que venía organizándose en el club de tenis Santa Ponsa desde 2016, debutará en el calendario tras la cancelación de 2020. Será el único campeonato de la ATP en España que se dispute sobre hierba.