El Atlético de Madrid es el primer caído español de la Superliga. La competición ahora queda reducida a tres clubes (Real Madrid, FC Barcelona y Juventus), puesto que el Inter también ha acompañado a los rojiblancos en esta salida express iniciada por los equipos ingleses. Junto al club colchonero, el Manchester United y el Inter de Milán han sido los últimos clubes en anunciarlo formalmente.

En un comunicado, la entidad que dirige Miguel Ángel Gil Marín deja entrever que el acuerdo no era vinculante: “El Consejo de Administración del Atlético de Madrid, reunido este miércoles por la mañana, ha decidido comunicar formalmente a la Superliga y al resto de clubes fundadores su decisión de no formalizar finalmente su adhesión al proyecto”.

Este punto es relevante, puesto que resta por saber si el abandono implicaría una penalización a los clubes salientes. La entidad rojiblanca es la primera que lo afirma públicamente. Además, asegura que el club “tomó la decisión el pasado lunes de sumarse a este proyecto, atendiendo a unas circunstancias que a día de hoy ya no se dan”.

“Para el club es esencial la concordia entre todos los colectivos que integran la familia rojiblanca, especialmente nuestros aficionados”, agrega en el comunicado, que se cierra con otra revelación notable, y de la que se ha hablado mucho en las últimas 48 horas: “La plantilla del primer equipo y su entrenador han mostrado su satisfacción por la decisión del club, al entender que los méritos deportivos deben primar por encima de cualquier otro criterio”.

Aunque no ha realizado ninguna declaración desde que anunciara oficialmente su adhesión, el Barça tendría la posibilidad de abandonar la Superliga próximamente ya que incluyó una cláusula en su acuerdo con la organización: sólo formalizaría su entrada si antes logra la aprobación de la Asamblea de socios, según avanzó TV3. Algo que parece harto improbable.