El matchday se ha convertido en el gran motor para la recuperación de los clubes. Aunque la televisión y algunos patrocinios parecían centrar todas las miradas en los palcos de los estadios, la ausencia del público en los partidos por culpa de la Covid-19 ha llevado al fútbol europeo a una situación de grave crisis. Las cifras son claras: las cinco grandes ligas dejaron de facturar 500 millones ingresos sólo en 2019-2020, mermado únicamente en el segundo semestre. La potencial pérdida conjunta para 2020-2021 supera los 2.000 millones de euros, según el estudio Football Benchmark que elabora Kpmg.
La liga que más ajustó sus cifras de negocio relativas al día de partido fue la Bundesliga. Al ser la competición con mayor afluencia media dentro del Big-5, también fue la que más perdió en ingresos: 157 millones de euros, concretamente. En ese mismo curso 2019-2020, la segunda liga que más cedió fue la Premier League, con 102 millones, y la tercera, LaLiga, con 101 millones. La Serie A dejó de facturar 79 millones por la puerta cerrada y, curiosamente, la única gran liga que no reanudó la competición en el primer año de pandemia, la Ligue-1, fue la que menos contrajo sus ingresos por matchday, dejándose 48 millones de euros. ¿La razón? Que es, con diferencia, la que menos público acoge, de media, en sus gradas.
En comparación con el último curso pre-pandemia, el número de partidos con público se redujo en 2019-2020 en un 27% en las cinco grandes ligas. Sin embargo, el estudio de la consultora elogia la vuelta de las competiciones, aunque fuera con las gradas vacías: “Proporcionó a los clubes la oportunidad de cumplir con muchas de sus obligaciones comerciales y ofreció a los aficionados en casa una distracción muy necesaria”.
Además, la pandemia detuvo lo que podría haber sido una temporada récord en términos de ingresos por día de partido: la asistencia a los estadios en tres de las cinco grandes ligas creció en la temporada 2019-2020, principalmente en LaLiga y la Serie A (con aumentos del 9% y el 8%, respectivamente). La tasa de crecimiento en la Premier League fue del 3% mientras que las de la Bundesliga y la Ligue 1 se mantuvieron constantes.
El Barça, el más castigado por la puerta cerrada
El informe también analiza la merma de la puerta cerrada en los grandes clubes europeos. Atendiendo a la gran capacidad de su estadio (99.000 espectadores) y al ritmo de crecimiento en el que llegaba LaLiga, al Barça la Covid-19 le giró el guion de su temporada en estos términos del negocio. El equipo catalán perdió 39 millones en ingresos en 2019-2020, el 39% de la merma total de LaLiga. Esto le convirtió en el club peor parada por la crisis de la Covid en relación con el matchday de todo el fútbol europeo, según Kpmg.
Si se le suman los 35 millones de euros que dejó de ingresar el Real Madrid, el segundo en la lista de los más perjudicados, los dos grandes clubes históricos españoles coparon el 73% del ajuste por matchday de la Primera División nacional.
Otros clubes europeos que perdieron muchos millones por el cierre al público de los estadios al arranque de la pandemia fueron el Schalke 04, que dejó de ingresar 26 millones y hoy compite en Bundesliga 2; el Manchester United, que se dejó 24 millones por este concepto y el campeón de la Champions League aquella temporada, el Bayern de Múnich, que sufrió un ajuste de 22 millones de euros.