El Real Madrid ya trabaja en la vuelta del público al Santiago Bernabéu. Después de año y medio, con la pandemia de por medio, disputando sus partidos como local en su ciudad deportiva, el club blanco planea volver a abrir las puertas de su estadio para el segundo fin de semana de septiembre. Además, la entidad ha decidido no cobrar, por el momento, el abono de 2021-2022, anticipándose al recorte previsto en el aforo, que podría situarse en un 50% (40.000 espectadores en su caso).

Según avanza AS, el Madrid ha informado ya a sus abonados sobre está cuestión. “En las circunstancias que se prevén, casi con total seguridad, no podrán acceder la totalidad de nuestros socios abonados a cada partido”, apunta la entidad. A falta de saber cómo podrán acceder los abonados, el club ya ha pasado el recibo de la cuota a sus más de 92.000 socios, que este curso pagarán 149,19 euros.

Por otro lado, el Bernabéu está en obras. Esta fue, de hecho, una razón capital para el traslado de los partidos del primer equipo a Valdebebas. La mudanza ha permitido acelerar los plazos de construcción del denominado Nuevo Bernabéu, que ahora deberá acondicionarse para la vuelta de sus aficionados. Según explica AS, “el césped está completamente levantado para que las máquinas puedan trabajar sobre el espacio del terreno de juego y hay que resembrarlo; buena parte de las gradas alta y baja están derruidas o cubiertas por andamios y la fachada este está desnuda”.

Como consecuencia de ello, el Madrid ya ha solicitado a LaLiga poder iniciar la temporada fuera de casa. En concreto, las tres primeras jornadas las disputaría a domicilio, como ya hiciera la Real Sociedad en 2018 por la reforma de Anoeta. Este es el último ejemplo de esta deferencia en el calendario liguero. Con ello, el club ganaría un mes más para tener todo a punto para recibir a la parroquia blanca de nuevo en su estadio.