La Uefa sanciona a dos de los gigantes del fútbol europeo. El regulador ha anunciado que Juventus y Chelsea FC deberán pagar 10 millones de euros cada uno, ambos por el incumplimiento de las normas de fair play financiero. El equipo de la Serie A, además, ha sido excluido de la Conference League de 2023-2024 y podría tener que pagar otros 10 millones más en caso de no solventar sus problemas financieros, según ha anunciado la confederación.
La investigación al conjunto italiano se inició durante la última temporada, a raíz de los escándalos en los que se ha visto envuelto en su país por la contabilidad de los salarios diferidos y los trueques de jugadores en traspasos. A eso se le suma las abultadas pérdidas, de más de 500 millones de euros desde 2017-2018, de las que la mitad se produjeron en 2021-2022.
Uefa indica que la Juventus deberá cumplir con el nuevo reglamento de sostenibilidad financiera en 2023, 2024 y 2025 para no tener que pagar los otros diez millones de la sanción. Eso implica no asumir pérdidas en ese periodo e ir rebajando el peso de la masa salarial progresivamente, de modo que al final del ciclo no represente más de un 70% de los ingresos totales.
En cuanto al Chelsea FC, la Sala Primera del CFCB atribuye los incumplimientos, relacionados con “la presentación de información financiera incompleta”, a la etapa en la que el club era gestionado por Roman Abramovich. “Tras la venta del club en mayo de 2022, la nueva propiedad identificó e informó de manera proactiva a la Uefa, casos de informes financieros potencialmente incompletos bajo la propiedad anterior del club”, indica.
En concreto, el problema estaría en la información relacionada con traspasos de futbolistas realizados entre 2012 y 2019. El pago de los 10 millones permite al grupo inversor encabezado por Tod Boehly “resolver completamente los asuntos denunciados”, al tiempo que le da un año para encauzar la situación económica tras la fuerte inversión realizada en fichajes.
El club londinense, que acumula un agujero de 251 millones de libras (285 millones de euros) entre 2019 y 2022, atribuye parte de los números rojos al bloqueo impuesto hasta la salida de Roman Abramovich como dueño. Sólo en 2021-2022 perdió 138 millones.
