El Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (Tjue) da un respiro al Valencia CF. El organismo ha desestimado el recurso de casación interpuesto por la Comisión Europea, que reclamaba 23 millones de euros, más intereses, al club che por presuntas ventajas obtenidas en el aval de 75 millones de euros firmado por su Fundación con el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF).
La entidad, en boca de su nuevo director corporativo, Javier Solís, se ha mostrado satisfecha porque “finaliza un proceso que ha durado muchos años”. Sobre el aval y su importe “nosotros siempre entendimos que estaba dentro de mercado”, ha agregado el dirigente en una entrevista concedida a los medios oficiales del club.
La resolución, firme y que no admite recursos, dicta que el Valencia CF no concurrió en ninguna irregularidad en la firma del préstamo para la Fundació VCF, que se fijó en 75 millones y con un tipo de interés del 6,5%. El Tjue coincide con la sentencia del Tribunal General que, en marzo de 2020, declaró nula la reclamación de la Comisión Europea.