Nueva víctima de la Covid-19 en la Premier League. El Southampton FC prácticamente duplicó sus pérdidas en 2019-2020, hasta 76,1 millones de libras (85 millones de euros). El club señala que la pandemia tuvo un “impacto significativo” en las cuentas, aunque la realidad es que sin pandemia señala que habría perdido en torno a 47 millones de libras (52,4 millones de euros).
La facturación total retrocedió un 15,4% interanual, hasta 126,6 millones de libras (141,4 millones de euros), sobre todo por las indemnizaciones asumidas por televisión y el impacto del cierre de los estadios. La factura audiovisual fue un 17,1% inferior, hasta 93,5 millones de libras, mientras que la recaudación por matchday bajó un 14,7%, hasta 14,5 millones de libras (16,2 millones de euros).
En total, la dirección calcula que terminar la temporada en julio tras varios meses de parón supuso perder 10,3 millones de libras en ingresos y diferir la contabilización de otros 20,9 millones de libras a 2020-2021.
En cuanto a los costes, el club se limita a señalar que tuvo que gastar 1,5 millones de libras más para “permitir que el primer equipo masculino entrenara y concluyera la temporada 2019-2020 en un entorno seguro”. Por otro lado, se han diferido pagos por 3,6 millones de libras al presente ejercicio.
Uno de los elementos a los que el Southampton también atribuye su problema es a su dependencia del mercado de fichajes, pues “la capacidad de generar ganancias […] se vio significativamente afectada”. De hecho, estas plusvalías por traspasos bajaron a 13,9 millones de libras (15,5 millones de euros). Además, las amortizaciones por fichajes subieron un 10%, hasta 56,7 millones de libras esterlinas (63,3 millones de euros). Toby Steele, director general del club, ha avanzado que en junio pudieran reestructurar su deuda para adaptarse a “un entorno financiero desafiante debido al impacto de la pandemia Covid-19”.