La SD Eibar reordena su organigrama tras quedarse a las puertas del ascenso. El club armero ha incorporado a Aritz Esteban como director corporativo, según ha podido saber 2Playbook. Entre las funciones del ejecutivo vasco, fichado de la SD Amorebieta, estará la de liderar el área de estrategia, hasta la fecha a cargo de Beñat Redondo, que abandona la entidad tras ocho años.
Esteban llega al club eibarrés tras una temporada como director adjunto del Amore en su debut en LaLiga SmartBank. Licenciado en Derecho, inició su trayectoria en la gestión deportiva en Guedan Servicios Deportivos como coordinador de instalaciones deportivas y, en 2019 dio el salto a LaLiga como director de proyectos en el departamento de relaciones institucionales.
Ahora llega al club armero como director corporativo y en su nuevo rol trabajará en el plan de crecimiento que el Eibar implementó la pasada campaña aprovechando la llegada de los fondos de CVC, que le aportarán 68 millones. Entonces, el club aunó toda su ejecutiva en cuatro grandes departamentos: estrategia (Redondo), negocio (Unai Artetxe), financiero (Gergori Prieto) y deportivo (César Palacios). Un movimiento interno para arrancar el plan de crecimiento que el Eibar implementó a principios de la pasada campaña, aprovechando la llegada de los fondos de CVC, que le aportarán 68 millones.
Para el área de estrategia, el consejero delegado del club, Jon Ander Ulazia, confió en Redondo, un hombre de la casa, que ha ido desarrollando su carrera en la entidad desde su llegada en 2014. Primero como administrativo, luego como director de planificación estratégica y control presupuestario y, en esta última etapa, como director de estrategia.
A la salida de Redondo se le suma la del director de transformación digital, Iker Frejo. Tras ocupar el cargo de director de IT en el Baskonia-Alavés durante cuatro años, llegó a principios de año a Ipurua para encargarse del desarrollo de nuevas áreas y potenciales negocios relacionados con la innovación. Su tarea era centralizar y gestionar toda la estrategia digital del club desde su departamento. Anteriormente, trabajó en el Gobierno Vasco realizando funciones sobre ciberseguridad.
Se desconoce quién ocupará esta labor tras su salida, pues desde el club se han limitado a señalar que no continúan tras un año en el que no han logrado regresar a Primera, con el impacto que eso tiene en términos económicos.
En su estancia en el club, Frejo debía encargarse de la securización de la información y de todo el desarrollo tecnológico que necesitaba el club, tanto del área de gestión como de la deportiva. Su tarea era centralizar y gestionar toda la estrategia digital del club desde su departamento, una serie de hitos sobre los que existen discrepancias en cuanto a su consecución.
Primera fase de la ciudad deportiva, terminada
Además de para la mejorar en innovación, el club guipuzcoano aprovechará los fondos del Plan Impulso para la nueva ciudad deportiva que levantará en la cercana localidad de Mallabia. Precisamente, esta semana ha concluido la primera fase de una obra en la que invertirá unos 20 millones de euros.
Por otro lado, la última fase de la reforma del Estadio de Ipurua, relativa a la tribuna oeste, también se pagará con los fondos de CVC, pues el proyecto permite meter en el paquete de inversiones la deuda asociada a los trabajos realizados a partir de 2018. Si se atiende al 70% de las partidas que deberán ser destinados a inversión patrimonial, al Eibar le sobra. En total, contará con algo más de 47 millones de euros para gastar en infraestructuras.
Tras su caída a Segunda, el Eibar encogió su negocio un 50%, hasta los 29,6 millones. Se desconoce el cierre del ejercicio, en el que preveía ganar 2,1 millones de euros. La entidad, que acumuló una caja de 47 millones en sus siete años en Primera, destinó cerca de 20 millones de euros a la plantilla deportiva gracias a la ayuda al descenso, que le aportó el doble que su propio negocio. En clave 2022-2023, el Eibar ya sabe que contará con el apoyo de su masa social, que ya supera los 5.900 abonados, más que nunca, según las últimas cifras anunciadas por la entidad armera.