“Somos un club muy ejecutivo”. Lo resumió David Espinar, director de gabinete de presidencia del Real Valladolid y mano derecha de Ronaldo Nazário tras la compra de la entidad en el verano de 2018. A ellos se sumó meses después Matthieu Fenaert, persona de máxima confianza del exfutbolista, al que nombró consejero delegado. Desde su llegada, el club ha iniciado un plan de profesionalización de todas sus estructuras, y en ese camino, el Valladolid ha realizado dos nuevos fichajes esta temporada: Daniel Prat, que desde abril lidera el negocio de ticketing, y Luis García Bravo, que se incorporó a principios de año al área financiera de la entidad.
Un refuerzo para sus estructuras económica y de negocio en el que el club ha apostado por ejecutivos con amplio recorrido y conocimiento del fútbol español. Prat es el encargado de desarrollar toda la estrategia del club para incrementar y explotar todo el negocio relacionado con la venta de entradas y el matchday. El nuevo responsable llega al club para cubrir un departamento hasta ahora liderado por Fernando Bacarin, que tras más de dos años al frente de la división de ticketing ha decidido poner fin a su etapa en España y regresar a Brasil. Bajo su batuta, el club alcanzó el récord de 22.240 abonados antes de la pandemia.
Ahora, Prat deberá asumir las riendas de un área que en el contexto actual no puede ofrecer resultados por el cierre al público del Nuevo José Zorrilla, pero en el que lleva meses trabajando el ejecutivo, con pasado en el mismo cargo en el Girona FC entre 2018 y 2020. Previamente, formó parte del área de ticketing del TD Systems Baskonia (2015-2017) y del Joventut de Badalona (2017-2018).
Aunque licenciado en Periodismo, Prat cuenta con varios certificados en sport management, entre los que destaca un MBA por la Universidad Europea y un Máster en data science & business analytics por la IMF Business School.
Daniel Prat liderará el negocio de ticketing tras su paso por Girona FC, Baskonia y La Penya
Por su parte, García Bravo ha aterrizado en Valladolid proveniente de LaLiga, donde ha trabajado desde 2015 como analista en el área de control económico-financiero de la gestora del fútbol profesional español. Se trata de uno de los departamentos de mayor influencia en los últimos tiempos, por lo que podrá aportar mucha de esa experiencia adquirida en la creciente área de finanzas del club vallisoletano. Además, el ejecutivo, con pasado en Deloitte y PwC, es docente en varias universidades y centros de estudios económicos como LaLiga Business School.
Reforzar un negocio que batió récords en 2019-2020
Prat y García Bravo se incorporan a un Valladolid al alza en lo económico. El club batió su récord de beneficios en 2019-2020 con 9,9 millones de euros y recuperó fondos propios positivos. Todo ello a pesar de sufrir una caída de sus ingresos ordinarios del 6%, hasta 50,5 millones, por el impacto de la Covid-19, que le ha obligado a traspasar 8,2 millones de facturación a 2020-2021.
Así, Ronaldo tiene prácticamente encarrilado el saneamiento que el Real Valladolid emprendió en 2017-2018 con su regreso a LaLiga Santander. El superávit del último curso permitió al club resolver su histórica situación de fondos propios negativos.
La obtención de unas ganancias elevadas era más que necesario, pues en el último curso se tenían que abonar 10,3 millones de los 15,56 millones de euros que quedaban por pagar del concurso de acreedores. De ese importe, 7,98 millones correspondían a la Agencia Tributaria que ya se han liquidado. En este sentido, el nivel de apalancamiento también se ha corregido de forma acelerada gracias a las plusvalías por traspasos y los derechos de televisión.
En cuanto al personal no deportivo, la profesionalización de estructuras tras el ascenso y algunos variables de la anterior alta dirección encabezada por Carlos Suárez justificaron el incremento interanual del 49%, hasta 6,1 millones.
Entre los proyectos que quiere acometer próximamente la propiedad destacan el estadio y la nueva ciudad deportiva. En el primero de los asuntos, la adquisición del Nuevo José Zorrilla se antoja difícil a corto plazo, pues el consejo del Valladolid considera excesiva la tasación de 21 millones de euros que se realizó sobre el vuelo del estadio. Por su parte, la inversión para la ciudad deportiva, cifrada en unos 10 millones de euros, sigue en stand by a la espera de que el club encuentre unos terrenos idóneos para llevar a cabo las obras.
El superávit del pasado curso permitió al club volver a contar con fondos propios positivos
Tras descartarse una parcela en la zona de Pinar de Jalón por resultar defectuosa, “ahora estamos preparando nuevas alternativas”, apuntaba Espinar a 2Playbook el pasado marzo.
El que sí está previsto presentarse muy pronto es el nuevo proyecto de internacionalización del club. Un plan para crecer fuera de España en el que Ronaldo cobra una relevancia capital como marca universal. “Tenemos un gran embajador internacional y estamos trabajando para que nos conozcan más”, destacaba Espinar sobre este proyecto que tiene como fin incrementar el negocio comercial del club, que aspira a rebasar los 6 millones de euros.
Actualmente, además de Ronaldo, Fenaert y Espinar, la primera plana en la estructura del club la componen Gabriel Lima (director de desarrollo de negocio), Jorge Santiago (director de operaciones) y Miguel Ángel Gómez (director deportivo).
