El Real Madrid Baloncesto cerró 2020-2021 con casi la mitad de las pérdidas que el Barça Bàsquet. El club blanco finalizó la pasada temporada con unos números rojos de 18,8 millones de euros, la cifra más baja desde hace más de una década, según las cuentas analizadas por 2Playbook Intelligence, la herramienta de análisis de mercado de 2Playbook, que ha accedido en exclusiva a las cuentas.
La sección de la canasta siguió en negativo, pues la disciplina aún está lejos de generar unos ingresos suficientes para cubrir el gasto que se asume en plantilla deportiva. Sin embargo, arrojó un volumen de pérdidas muy alejado del registrado en las últimas temporadas. Desde 2017-2018, el club ha perdido más 27 millones de euros anuales de media, compensados por la actividad del fútbol. ¿Cómo se explica que en el año de la pandemia el equipo de baloncesto perdiera menos dinero que en una temporada normal? La clave está en las plusvalías por traspasos, nada habitual en el baloncesto.
Facundo Campazzo y Gabi Deck pusieron rumbo a la NBA tras abonar sus cláusulas de rescisión, de seis millones y dos millones de euros, respectivamente. De ahí que la entidad presidida por Florentino Pérez se anotara unos ingresos extraordinarios de 7,83 millones de euros por este concepto, una cifra inusual en una sección que, durante las seis temporadas anteriores, había promediado 850.000 euros en ingresos por la salida de jugadores.
El Real Madrid Baloncesto recortó sus pérdidas un 28,4% en 2020-2021
En 2016-2017, cuando Sergio Rodríguez volvió a la NBA, las plusvalías fueron de 3 millones (su cláusula era de 2,5 millones), y con la salida de Luka Doncic el club se anotó un ingreso de 1,9 millones de euros. La última perla con la que el Real Madrid hará caja es Usman Garuba, rumbo a Houston Rockets previo pago de 3 millones de euros en 2021-2022. Esa es, exactamente, la cantidad que el club ha presupuesto para este año en el apartado de traspasos.
Las ventas de jugadores ayudaron al Real Madrid a mitigar el golpe de la Covid-19 y a reducir sus pérdidas un 28,4% en 2020-2021, pese a que el negocio ordinario retrocedió un 22,8% interanual, hasta 11,1 millones. El principal motivo fue la falta de recaudación por día de partido, puesto que antes de la pandemia el Real Madrid llegó a facturar 5,4 millones por este concepto y en 2020-2021 apenas vendió entradas por 50.000 euros, un 98% menos que en el año anterior.
También cayeron los ingresos por Euroliga y amistosos, que se redujeron un 34,8%, hasta 560.000 euros, al no lograr clasificarse para disputar la Final Four. Eso sí, la factura audiovisual mejoró un 27%, hasta 3,4 millones, si bien el patrocinio continuó siendo el principal generador de negocio del equipo de baloncesto, con 7 millones, un 4,9% más. Ahí destaca la continuidad de Palladium como socio principal.
Los gastos de plantilla (incluido personal no deportivo) se recortaron un 4,4%, hasta 31,1 millones de euros, a lo que hay que sumarle un descenso de casi el 19% en el recibo de operaciones y viajes. Es decir, que no toda la plantilla aceptó la nueva rebaja salarial del 10% que la dirección negocio con la mayoría de atletas profesionales.
De cara a 2021-2022, el Real Madrid Baloncesto prevé perder 25,8 millones de euros, y de confirmarse este presupuesto supondrá un aumento del 37% interanual en los números rojos. Y eso que la entidad confía en que los ingresos vuelvan a niveles precovid, con 15,2 millones de euros, un 36% más, gracias al fuerte incremento previsto en el ticketing y los abonos.
La previsión es el matchday genere 3,9 millones, un nivel de ingresos todavía inferior al que tenía antes de la crisis sanitaria. Desde hace varias jornadas, el equipo ya está pudiendo jugar con un 80% de aforo en el WiZink Center, si bien de momento no ha alcanzado dicho límite porque la demanda de entradas ha sido inferior. El club también espera mejorar un 3,9% su negocio comercial, hasta 7,3 millones, aunque apunta a que los ingresos audiovisuales se resientan un 1,9%, hasta 3,4 millones de euros.
En cuanto al coste de la plantilla deportiva y administrativa, se apunta a un aumento del gasto del 12,3%, hasta casi 35 millones de euros.