El RC Polo tira de ‘hucha’ para encajar las pérdidas de 2020 y retoma su plan inversor de 5 millones

El club barcelonés, que en un año normal factura más de 23 millones de euros, logró mantener estable su masa social durante la pandemia y, aunque con un año de retraso, iniciará tras el verano las obras de su nuevo gimnasio y piscinas interiores.

RC Polo Barcelona

Momentos de transformación y adecuación a la demanda en el RC Polo de Barcelona. El club deportivo, centenario y uno de los históricos a nivel estatal, ha logrado capear el temporal de la Covid-19. La pandemia ha impacto en sus cuentas en el último año, “y seguirá impactando, aunque en menor mediad, en 2021”, pero la entidad cuenta con recursos propios suficientes como para compensar las pérdidas con las que cerró 2020, según indica su presidente, Curro Espinós, a 2Playbook.

No hemos precisado ningún tipo de financiación externa gracias a la disponibilidad de tesorería con que contaba el club en ese momento para afrontar la obra del área de fitness”, apunta Espinós, sobre los saldos que la institución fue acumulando en los últimos años para financiar el proyecto sin recurrir a la banca. “Esta situación nos ha permitido seguir autofinanciándonos y hacer frente a todas las devoluciones de inscripciones a escuelas deportivas y a actividades dirigidas que tuvimos que realizar en el ejercicio anterior y seguir afrontando los gastos fijos de la entidad”, añade.

Para 2021, el objetivo es alcanzar el equilibrio presupuestario y recuperar parte de los ingresos por servicios que la pandemia se ha llevado por delante. En 2019, la facturación del club por todos los conceptos ascendió a 23,4 millones de euros. En la recuperación de negocio, que la industria sitúa más bien en 2022, también tendrá un papel clave la puesta en marcha de nuevas instalaciones.

El área de fitness del que habla el presidente del Polo es uno de los grandes proyectos que arranca este año el club. Un espacio que conllevará la construcción de un nuevo gimnasio y piscinas interiores. La inversión patrimonial se sitúa entre los cinco millones y seis millones de euros. “Por motivos de prudencia, la junta directiva decidió aplazar el inicio de la obra que estaba previsto para el mes de octubre de 2020. Finalmente, emprenderemos la obra a principios de octubre de este año sin modificar el planteamiento inicial”, avanza.

¿Por qué esta mayor apuesta por el fitness? “Este universo ha ido creciendo y consolidándose en la sociedad actual y nuestros socios no son ajenos a ello. La gran demanda de actividades de fitness, nos llevó a montar un equipo profesional de primer nivel para cumplir con todas las expectativas. Con el paso de los años, el crecimiento de esta área requiere de una infraestructura mucho más amplia y completa, por lo que la obra se hace imprescindible”, destaca el presidente del club.

El club barcelonés potenciará su área de fitness con la construcción de un nuevo gimnasio y piscinas interiores

El año de retraso en la infraestructura ha ido ligado directamente a los estragos sociales y económicos provocados por la pandemia. En este sentido, Espinós se congratula de que el club ha mantenido estable su masa social pese a que este segmento es uno de los que más bajas ha sufrido por los nuevos hábitos promovidos por el teletrabajo. Sin embargo, el Polo cerró el año con 10.795 socios, y ha recibido “numerosas nuevas altas, posiblemente, por el repetido confinamiento comarcal obligado por las autoridades sanitarias”. A su favor, 29 hectáreas de pulmón verde dentro de Barcelona.

Al respecto, el directivo asegura que el club cuenta con una masa social amplia que le permite no tener que hacer “un esfuerzo” para la captación de socios para centrarse en “no afectar los estándares de calidad de servicio y confort a los que nuestros socios están acostumbrados”.

 

La restauración, el área de negocio más afectado

Entre los servicios que ofrece el Polo a sus socios y no socios se encuentra la restauración, gestionada por el club. En total, cuenta con cuatro restaurantes donde ofrece desde desayunos hasta banquetes de boda. Por culpa del confinamiento, ha sido también el área de negocio más afectada, “ya que ha sufrido una caída de facturación muy importante pues, además del cierre total de la actividad durante dos periodos de 2020, han sido continuas las restricciones de horarios y sobre todo se han dejado de realizar banquetes y eventos de todo tipo”, lamenta Espinós.

Por otro lado, la Covid también ha implementado e impulsado otros servicios. El más evidente, todo el relacionado con el área digital. “Nos hemos puesto las pilas en este terreno”, reconoce el presidente del Polo. El club permite ahora poder realizar muchas gestiones online, y presentará nuevos avances en esta materia “en un breve plazo”, avanza el dirigente.

Además de por su actividad diaria, el Real Club Polo es conocido en la industria del deporte por la organización de eventos nacionales e internacionales. Es sede, entre otros, del concurso hípico CSIO Barcelona, “que ha celebrado ya 108 ediciones y actualmente acoge la final de la Copa del Mundo por Naciones”, recuerda el dirigente, cuyo mandato al frente de la institución fue renovado el pasado año, dos meses antes del estallido de la Covid. Presidente desde 2016, en sustitución de Eudaldo Bonet, Espinós continuará en el cargo, al menos, hasta 2024.

Más allá de su gran evento ecuestre, el club organiza competiciones de pádel y tenis, entre otras modalidades, y su máximo dirigente asegura que “estamos siempre abiertos a acoger acontecimientos de la ciudad cuando se nos solicita”. Ahí, en relación a las autoridades locales, Espinós de Pascual cree que los clubes deportivos “necesitaríamos de más ayudas”. A veces pienso que es un milagro que clubes privados como el nuestro podamos celebrar eventos internacionales de gran envergadura que, además sitúan a nuestra ciudad como referencia del deporte internacional. Cada año cuesta más cuadrar los presupuestos de dichos eventos y necesitamos más recursos económicos públicos”, sentencia el presidente del Polo.

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