El RCD Espanyol volverá a Primera División, y lo hará con mucho más músculo económico. Rastar Group ha puesto en marcha una ampliación de capital por 37,85 millones de euros mediante la compensación de créditos. Es decir, que liquidará toda la deuda financiera existente de un plumazo, lo que incrementará de forma ostensible su límite de gasto en 2020-2021.

La operación debe ser aprobada en junta extraordinaria de accionistas, pero el grupo chino tiene el 99,25% y no se encontrará ninguna oposición a esta operación de saneamiento del balance en una temporada que, si no se produce ningún traspaso, se cerrará probablemente con pérdidas.

Además, supone dejar en mínimos la deuda neta del club cinco años después del cambio accionarial. A principios de febrero, Rastar decidió aportar distintas líneas de crédito por 20 millones de euros para cancelar los préstamos existentes con fondos de inversión especializados. “Nos reduce los costes financieros de forma directa”, argumentaron entonces desde los despachos del RCDE Stadium.

Antes de esta operación, el grupo chino tenía vivas tres líneas de crédito, con diferentes fechas de vencimiento: tres millones el 10 de julio de 2021, cinco millones el 30 de diciembre de 2021 y 1,8 millones en febrero de 2022. Es decir, que con posterioridad se han producido aportaciones adicionales hasta esos casi 38 millones de euros que ahora se capitalizarán.

En términos de cálculo de LaLiga, la deuda neta del Espanyol se recortó de forma importante en 2019-2020 gracias a las operaciones con su máximo accionista, bajando de 76,67 millones a 46,46 millones de euros. Esta cifra equivale al 34% de los ingresos relevantes del curso, muestra de la estable situación financiera del club. En total, Rastar ha inyectado ya más de 115 millones de euros al margen de la compra de acciones.

El club cerró 2019-2020 con unos ingresos récord de 135 millones, pero la pandemia se comió un 50% del beneficio previsto y se situó en 9,1 millones, clave para rematar el saneamiento y reforzar plantilla con fichajes como los de Raúl de Tomás o Adrián Embarba, claves en la consecución del ascenso.

El club aprobó un presupuesto para 2020-2021 de 72,5 millones de euros, de los que 20 millones debían llegar con la venta de jugadores. Sin embargo, el regreso a la élite y la situación del mercado hacen prever un esfuerzo por mantener a los principales futbolistas del primer equipo el próximo año.