El PSG ha llegado a un acuerdo con el portal de reventa de sneakers GOAT para la manga de la camiseta a partir de 2022-2023. El patrocinio representará 50 millones de dólares (45,8 millones de euros) en ingresos para las próximas tres temporadas, según ha avanzado Bloomberg. La compañía sustituirá en la equipación a QNB (Qatar National Bank).
El club parisino tendrá su tienda propia dentro de la plataforma de GOAT, donde pondrá a la venta productos de edición limitada, colaboraciones y artículos vintage. El PSG sigue siendo un imán para las marcas internacionales que buscan adentrarse en el mercado de la publicidad deportiva.
GOAT podrá realizar activaciones con futbolistas como Messi o Neymar. La empresa norteamericana, valorada en 3.700 millones de dólares (3.392 millones de euros), también mantiene un acuerdo con los Brooklyn Nets de la NBA.
Este patrocinio se suma a la transición de marcas publicitarias que habrá en las equipaciones del PSG a partir de la próxima temporada. Si bien Nike seguirá con los parisinos hasta la temporada 2032, el diario francés L’Équipe adelantó recientemente la previsible salida del patrocinador principal, Accor.
Entre las marcas que podrían sustituir a la cadena hotelera en el frontal de la camiseta del PSG se encuentra Qatar Airways, con quien la entidad propiedad del Gobierno catarí mantendría avanzadas las negociaciones, según el citado rotatitvo francés. En un segundo escalafón de partners se encuentran Ooredo, Visit Rwanda, Gorillas, Orange, beIN Sports, EA Sports y Autohero, entre otros.
Qatar: inyección de 171 millones para compensar pérdidas Covid
Tras la pandemia, Qatar sacó la chequera para compensar las pérdidas del PSG por la Covid-19. El fondo soberano catarí, Qatar Sport Investment (QSI), propietario del club desde 2011, inyectó 171 millones de euros en la entidad parisina, que se dejó 124,2 millones de euros sólo en la primera temporada afectada por la pandemia (2019-2020). A este primer roto, se prevé que se sumen otros 204 millones de euros en el último ejercicio.
Se trata de la segunda inyección de capital que realiza el fondo catarí después de la primera gran operación que llevó a cabo en 2017-2018. Entonces, inyectó 316 millones de euros en el club para poder hacer frente a la compra de Neymar y Kylian Mbappé en un mismo verano.
En 2019-2020, el PSG cerró ejercicio con una cifra de negocio de 540 millones de euros, un 15% menos interanual, algo que preveía revertir este año con un presupuesto de 600 millones de euros, lo que supondría un incremento del 11%.