La Liga F ha de mover ficha para no perder su estatus en Europa. Es lo que dice el mercado, el de fichajes y el del negocio, en el que las cifras de una competición en particular amenaza su reinado. Pese a que España es la vigente campeona del mundo, y del dominio del FC Barcelona (tres Champions en los últimos cuatro años), la Women’s Super League (WSL) inglesa va en camino de vencer también en el fútbol femenino europeo. La Premier League viene apoyando fuerte a la competición, y sus clubes –conforman el 100% de la WSL– acaban de tomar la gestión de la Primera y Segunda División, hasta ahora en manos de la federación (FA). En 2022-2023, sus doce clubes facturaron 48 millones de libras (56,3 millones de euros), un 50% más interanual y un 40% más que la Liga F (40 millones de euros entre 16 clubes), según datos de Deloitte y del Consejo Superior de Deportes (CSD), respectivamente.
Con sólo un 2% del presupuesto total del club, el Chelsea femenino, el más poderoso del país, cuenta con un presupuesto de más de 13,1 millones de libras (15,3 millones de euros), según se desprende de un informe elaborado por Intelligence 2P, la unidad de estrategia y datos de 2Playbook, sobre el peso de las secciones femeninas en el negocio de los grandes equipos europeos. El presupuesto medio del primer equipo femenino del Big Six –al que se le suma el Everton FC en el futfem– fue de 7,4 millones de libras (8,7 millones de euros) en 2022-2023. En Liga F, sólo el Barça supera los 10 millones de negocio. En Estados Unidos, los ingresos de las franquicias van a más, con cuatro equipos superando los 10 millones de dólares (9 millones de euros) de negocio en 2023 y, entre ellos, dos destacados: San Diego Wave, con 16 millones de dólares (14,4 millones de euros), y Angel City, el equipo que más dinero mueve hoy en el fútbol femenino, con 31 millones de dólares (27,9 millones de euros).
Las previsiones pasan por alcanzar los 68 millones de libras (79,7 millones de euros) esta próxima temporada; es decir, otro incremento del 42% respecto a 2022-2023. ¿Y cómo aspira a crecer? Siguiendo la tónica general del fútbol femenino, apostando de inicio por la marca. Los ingresos comerciales representaron el 35% de la facturación total en la WSL 22-23; la televisión, un 15%. Una diferencia sustancial respecto al fútbol masculino y en el que tiene un alto potencial la liga inglesa. En la última temporada con datos disponibles, los ingresos por patrocinio y publicidad ya alcanzaron los 17 millones de libras (20 millones de euros) en conjunto, con los dos clubes de Manchester copando la mitad: el United, 5,2 millones de libras (6,1 millones de euros) y el City, 3,6 millones de libras (4,2 millones de euros).
Además de los ingresos de los clubes, la competición cuenta con un patrocinio principal de récord en Europa. La financiera Barclays es title sponsor de la WSL por 10 millones de libras (11,7 millones de euros) anuales, un acuerdo de tres años que acaba de expirar y que se habría renovado por una cantidad muy similar, según The Daily Telegraph. Igualmente, el cambio en la gestión de la liga podría traer cambios en estos activos comerciales principales. Uno de los más importantes es Nike, proveedor de los balones como socio técnico de la federación inglesa. En la Premier League, la marca de Oregon dará paso a Puma a partir de 2025.
De cambiar de marca de balones, la WSL tendría este socio en común con la Liga F, que sigue buscando un title sponsor tras el roto que dejó Finetwork. Desde la competición afirman que la teleco no pagó los 4 millones del primer año del acuerdo de tres temporadas y 15 millones que firmaron cuando arrancó la liga profesional, algo que desde la compañía desmienten argumentando que no existía ningún tipo de acuerdo firmado. El negocio comercial de la Liga F está a salvo gracias al acuerdo que mantiene con LaLiga para que ésta explote su negocio comercial a cambio de 42 millones hasta 2027. Según ha podido saber este medio, la liga trabaja para alcanzar un acuerdo “pero no a cualquier precio”.
Más de un millón de aficionados en las gradas
La televisión se sitúa en el segundo nivel de ingresos, con los 8 millones de libras (9,4 millones de euros) que pagarán Sky Sports y BBC esta temporada. Sin embargo, y de vuelta al cambio de gestora de la liga, los clubes confían en firmar el próximo año un nuevo contrato de entre 15 millones y 20 millones de libras por temporada (entre 17,4 millones y 23,3 millones de euros). En España, Dazn y Mediapro emiten la Liga F con un contrato valorado en 7,2 millones anuales (2022-2027).
Por último, y no lejos de los ingresos audiovisuales, la tercera gran pata del crecimiento que proyecta la WSL en los próximos años tiene que ver con el matchday. Los ingresos por día de partido, a través de los abonos, la venta de entradas y el resto de gastos en el estadio, alcanzaron los 7 millones de libras (8,2 millones de euros) en 2022-2023, un 67% más que en Liga F (4,9 millones de euros). La asistencia acumulada superó el millón de espectadores en la Primera y Segunda División (Women’s Championship) inglesa. De media, 5.616 personas acudieron a cada partido de la WSL, frente a los menos de 2.000 de 2021-2022. En su rival española, la asistencia creció un 13% en 2022-2023, hasta superar los 370.000 espectadores.
Pérdidas de 25 millones… asumidas sin pegas
Y si se han disparado los ingresos, los gastos no fueron menos. Los costes de personal –sueldos de las jugadoras, principalmente– alcanzaron los 36 millones de libras (42,2 millones de euros), con un alza del 45% en 2022-2023. Copan más del 75% de los ingresos totales. Un porcentaje alto que es todavía mayor en los clubes grandes. De hecho, el gasto en salarios de sólo cuatro equipos (Arsenal, Chelsea, Manchester City y Manchester United) representaron casi el 60% del total de la liga. El conjunto gunner es el más caro, con 6,2 millones de libras (7,3 millones de euros) hace dos temporadas, según datos de Intelligence 2P.
El Chelsea no ofrece datos desagregados, aunque su gasto total supera los 13 millones de libras (15,2 millones de euros), lo que presupone un alto coste en personal. Al respecto, la propiedad ha decidido independizar la sección femenina creando una unidad de negocio específica y busca inversores para acelerar el proyecto, que valora en más de 200 millones de dólares (180 millones de euros).
Con todo ello, las pérdidas siguen una tendencia alcista en la WSL. En 2022-2023, alcanzaron los 21 millones de libras (25 millones de euros), un 50% más interanual. Y la previsión es que vaya a más hasta que la nueva promotora de la competición comience a firmar nuevos acuerdos y consolidar su negocio como liga gestionada por los clubes. Para compensar los números rojos, muchos equipos reciben aportaciones de sus clubes Premier, que aceptan el déficit temporal que requiere el crecimiento de la liga para ser la dominante en Europa. En Liga F, el dibujo no es el mismo: grandes clubes, como el Levante UD, han asumido que, con el equipo masculino en Segunda, han de frenar el gasto; y, en otros casos, se pelea por mantener el presupuesto.
A nivel global, la NWSL estadounidense ya queda lejos: además de la inversión mayor recibida por sus propietarios –en parte, por ser liga cerrada–, esta temporada arranca su nuevo megacontrato audiovisual de 60 millones de dólares (54 millones de euros) anuales para el ciclo 2024-2027. Siete veces superior al de WSL y Liga F. El objetivo del futfem inglés es poder aminorar esas diferencias para no convertirse en la réplica de lo que es hoy el baloncesto europeo para la NBA. La CEO de la nueva gestora de la WSL es Nikki Doucet, una ex alta ejecutiva de Nike, que resalta el trabajo en conjunto “con todas las partes para impulsar un crecimiento transformador y sostenible”. La dirigente se refiere a la unidad que hay en Inglaterra entre ligas, clubes y federación. Como ejemplo: el préstamo de 20 millones de libras (23,5 millones de euros) sin intereses que le ha expedido la Premier League para arrancar con el proyecto.
En España, donde ahora empieza a haber esa sintonía entre Liga F, Rfef y LaLiga, esa aportación la realizó el Consejo Superior de Deportes (CSD) con 15 millones comprometidos para la gestora en tres años y hasta 18 millones para los clubes, que la debían utilizar en infraestructuras y profesionalizan de sus estructuras. Pese a la recepción de estos recursos públicos, ya son varias las figuras de la Liga F (Mariona Caldentey, Mayra Ramírez…) que han decidido volar a las islas para proseguir con su carrera deportiva.
Sobre Intelligence 2P
Intelligence 2P es la unidad de estrategia e inteligencia de mercado de 2Playbook, cuya plataforma de datos monitoriza en tiempo real el negocio de 60 clubes de LaLiga, Liga F y Primera Rfef; 200 clubes de ligas europeas; 22 clubes de ACB y Primera FEB y otra veintena de Euroliga, Eurocup y BCL.
La plataforma también contabiliza la asistencia a todos los eventos deportivos, de entretenimiento y música en España, así como más de 24.000 contratos de patrocinio en el mercado español y otros 7.000 contratos de las ligas europeas y norteamericanas de fútbol y baloncesto, segmentados por competición, tipología de activos, marcas, categorías de producto y valor económico aproximado de cada acuerdo. Si quieres más información, contacta con nosotros a través de intelligence@2playbook.com.