El Manchester United continúa en rojo pese a la total reactivación de su negocio tras la pandemia. El club inglés, en proceso de venta por parte de la familia Glazer, ha cerrado el primer trimestre de 2022-2023 con unas pérdidas de 26,5 millones de libras (30,7 millones de euros), según ha informado el club.
Una de las grandes novedades ha sido que el consejo de administración no ha aprobado el pago de dividendos a los accionistas, que en 2021-2022 se embolsaron 10,7 millones de libras (12,4 millones de euros) sólo en este trimestre.
En la presentación de resultados, el equipo de la Premier League ha destacado la vuelta a la normalidad de la industria del deporte que, en su caso, es clave por la gran fortaleza de su marca global. La cifra de negocio se disparó un 71% interanual en el periodo que va de julio a septiembre, hasta 143,7 millones de libras (166,6 millones de euros). De este importe, un 61% se corresponde al área comercial, diez puntos porcentuales más respecto al mismo periodo de 2021-2022.
En concreto, los patrocinios y las alianzas comerciales le aportaron 87,4 millones de libras (101,3 millones de euros) en el primer trimestre de 2022-2023, un 36% más que en el mismo tramo del ejercicio anterior. Ahí destacan las giras de verano y la entrada de nuevos patrocinadores como Betfred, Qualcomm, Therabody y, principalmente, DXC, que se ha hecho con la manga de la camiseta. Este activo estaba valorado en 20 millones de libras (23,2 millones de euros). Más que los 16,6 millones de libras (19,2 millones de euros) que obtuvo por plusvalías por traspasos en el pasado verano.
La factura audiovisual, en cambio, descendió un 19%, hasta 35 millones de libras (40,6 millones de euros). ¿El motivo principal? Caer de la Champions League a la Europa League esta temporada. El 15% restante del negocio ordinario de los red devils en este periodo lo aportó el matchday, donde se incluyen también la cesión de Old Trafford para otros eventos. De hecho, el club reconoce que en los 21,3 millones de libras (24,7 millones de euros) ingresados por esta vía, que le permitieron crecer un 13,3% interanual, fueron claves el alquiler del estadio para el partido inaugural de la Euro femenina del pasado verano y para la final de la Superliga de rugby.
Estas mejoras en el negocio ordinario no le permitieron, sin embargo, compensar el crecimiento de los gastos. Sólo a personal –donde se incluyen los salarios de la primera plantilla– se destinaron 82,3 millones de libras (95,4 millones de euros) en este periodo, un 7% más. También crecieron los gastos operativos, que alcanzaron los 163,7 millones de libras (189,9 millones de euros), un 6% más.
Asimismo, cabe destacar que ya se evidencian los compromisos de pagos por el rally de fichajes realizados por el club en verano, elevando las amortizaciones hasta 40,1 millones de libras (46,5 millones de euros), un 14% más en el primer trimestre.
En cuanto a la deuda financiera del club, ésta se situaba al cierre del primer trimestre del ejercicio en 680,3 millones de libras (788,8 millones de euros), un 7% más que a 30 de septiembre de 2021. Sólo a corto plazo, la deuda financiera era de 102,9 millones de libras (119,3 millones de euros).
Por último, y animado por la buena senda del negocio comercial, el United ha elevado sus previsiones de facturación para 2022-2023 a una horquilla de entre 590 millones y 610 millones de libras (684 millones y 707 millones de euros), un 2% más que el previsto inicialmente.