El Manchester United contuvo relativamente bien el golpe del Covid-19. El club de la Premier League cerró 2019-2020 con unas pérdidas de 23,2 millones de libras (25,4 millones de euros), frente a las ganancias de 18,8 millones de libras (20,6 millones) del año anterior. Son unos números rojos muy por debajo de los sufridos por rivales como el FC Barcelona, la Juventus o el Borussia Dortmund, aunque el origen es el mismo: la dramática caída de ingresos.
La cifra de negocio ordinaria retrocedió un 18,8% interanual, hasta 509,04 millones de libras (558,3 millones de euros), mientras que las plusvalías por traspasos cayeron un 28,7%, hasta 18,4 millones de libras (20,2 millones).
El mayor hundimiento de la actividad se produjo en la partida audiovisual, con un descenso del 41,9% interanual, hasta 140,2 millones de libras (153,7 millones de euros). La dirección atribuye este descenso a dos razones: no haber disputado la Champions League, como sí hicieron en 2018-2019, y el hecho de que diez partidos se jugaron entre julio y agosto, por lo que se cobrarán en 2020-2021.
A eso, añade en sus cuentas no auditadas, que “los ingresos se han visto afectados aún más por los reembolsos de la Premier League, estimados en aproximadamente 14 millones de libras (15,3 millones) para toda la temporada 2019-2020, debido a los retrasos y cambios en el horario de las retransmisiones de partidos”.
La reestructuración del calendario a causa del Covid-19 fue acompañada del cierre total de los estadios, razón por la que los ingresos por día de partido cayeron un 18,8% interanual, hasta 89,8 millones de libras (98,4 millones de euros). Es el precio de haber jugado tres partidos de Premier sin público en Old Trafford, así como toda la fase final de la Europa League.
El único bastión donde el United ha podido defenderse es en el comercial, cuyas ventas en 2019-2020 fueron un 1,4% superiores a las del ejercicio anterior, hasta 279 millones de libras (306 millones de euros). El club atribuye la mejora a la llegada de nuevos patrocinadores y la disputa de más partidos de pretemporada en el verano de 2019, que ha compensado la caída del 5,7% en merchandising por el cierre de la tienda de Old Trafford. Además, adelanta que Chevrolet ha ampliado en medio año su contrato de patrocinio principal, hasta diciembre de 2021, como compensación por el impacto de la pandemia en la activación del acuerdo.
El hecho de que las pérdidas no hayan ido a más es el trabajo de contención de costes ejecutado por los Red Devils. Los costes operativos se recortaron un 13,4% interanual, hasta 522,2 millones de libras (572,7 millones de euros), y en gran medida fue por el pago de menos nóminas, que supusieron 284 millones de libras (311 millones de euros), un 14,5% menos, debido al traspaso de algunos futbolistas con nóminas altas, acuerdos de cesión y “reducciones acordadas en los salarios de los jugadores como resultado de la no participación en la Uefa Champions League”. Las amortizaciones por fichajes bajaron un 1,9%, hasta 126,7 millones de libras (139 millones de euros).
Las pérdidas han supuesto una fuerte reducción de su posición de caja, que pasó de 307,6 millones a 51,5 millones de libras (de 337,3 millones a 56,5 millones de euros). En consecuencia, la deuda neta prácticamente se dobló de un año para otro, hasta 474,1 millones de libras (520 millones de euros). A futuro, el club no se atreve a hacer previsiones sobre la rentabilidad del negocio, puesto que “la pandemia de Covid-19 continuará impactando los resultados”.