El Manchester City se defiende atacando. El club inglés ha acudido a la Justicia para intentar frenar la investigación que la Premier League abrió en 2019 por una presunta infracción del fair play financiero. Este caso sigue los mismos cauces que las indagaciones que realizó Uefa y que acabó con una sanción posteriormente anulada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
La Premier investiga las finanzas del City con la sospecha de que el club ha disfrazado la inversión de su propietario, Sheikh Mansour, haciéndola pasar por ingresos por patrocinio, tal y como publicó el rotativo alemán Der Spiegel tras una filtración de Football Leaks.
Al respecto, el City siempre ha insistido en que no ha infringido ninguna normativa y ha denunciado los documentos robados por Football Leaks como “materiales fuera de contexto” que se publicaron como parte de un “intento organizado y claro de dañar la reputación del club”.
Ahora, The New York Times avanza que el City ha acudido a la Justicia para defenderse de una investigación en la que argumenta que “el club no obtendrá una audiencia justa”, según revelan los documentos de los abogados citizens.
La infracción de las reglas financieras de la liga inglesa podría derivar una reducción de puntos e importantes multas económicas para el City, que está a punto de llevarse su tercera Premier League en las últimas cuatro temporadas.