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Limak se asocia con los asesores del Emirates Stadium y de Wembley para el Spotify Camp Nou

La empresa turca ha firmado una alianza con Robert Bird Group, consultora de ingeniería, que se encargará de la planificación y las estructuras del nuevo estadio del FC Barcelona. Gesha, empresa española, será el socio de diseño de ingeniería.

spotify camp nou Barça

Limak encuentra socios para desarrollar el proyecto del Spotify Camp Nou. La empresa turca compensará la falta de experiencia en la construcción de grandes estadios de fútbol recibiendo el asesoramiento de dos empresas especializadas.  Por un lado, Robert Bird Group se encargará de la planificación y las estructuras del nuevo estadio del FC Barcelona. 

Esta consultora de ingeniería ha participado en la construcción y remodelación de otros recintos deportivos, como el Emirates Stadium, Wembley y el estadio Olímpico de Londres, el estadio de los Arizona Cardinals de la NFL y el Melbourne Cricket Ground, que tiene un aforo de más de 100.000 personas de capacidad. 

El otro socio que Limak ha incorporado al proyecto es Gesha, empresa española que se encargará del diseño de ingeniería del proyecto. Cuenta con más de 500 empleados y gran experiencia en proyectos como los Aeropuertos de Barcelona y Madrid, así como el edificio Tokamak del Reactor de Fusión Iter de Francia, entre otros. 

Limak tiene previsto iniciar las obras del nuevo Spotify Camp Nou a partir del próximo junio. La compañía turca ha abierto oficinas en Barcelona con las que espera poder atender otros proyectos en Europa y América Latina. En ellas cuenta con 40 trabajadores, cifra a la que espera sumar otros 200 empleados para 2026. Actualmente, cuenta con más de 200 proyectos valorados en más de 25.000 millones de dólares (23.642 millones de euros) y 46.000 empleados en todo el mundo. 

La empresa turca, considerada la segunda constructora más importante de su país, esta especializada en la construcción de hoteles, autopistas, aeropuertos y plantas hidroeléctricas, entre otros. En deporte, su principal obra fue el Estadio Mersin, con un aforo de 25.500 espectadores y que fue sede de los Juegos del Mediterráneo de 2013. Limak Construction, fundada en 1976, cuenta con experiencia en el sector con una gran presencia en países como Turquía, Rusia, India, Kuwait, Irak, Arabia Saudí, Macedonia, Albania, Kosovo, Pakistán, Costa de Marfil, Egipto y Senegal.

Limak se impuso a dos importantes asociaciones de empresas constructoras en el concurso por la remodelación del Camp Nou: una formada por Ferrovial, Acciona, Copisa, Sorigué, Copcisa y Rubau, y otro por FCC y Comsa. Dos días después de su adjudicación dimitió Jordi Llauradó, responsable del Espai Barça, argumentando que este proyecto requiere mucho tiempo de dedicación y que él no podía hacerlo compatible con sus compromisos internacionales. 

Al Barça le convenció tanto el precio como los plazos de ejecución a los que se comprometía la constructora turca. En concreto, garantiza que las obras estarán acabadas “antes de junio de 2026”, aunque la vuelta del equipo al Camp Nou podría llegar antes del 29 de noviembre de 2024, fecha del ciento-vigésimo quinto cumpleaños. 

A finales de 2021 los socios del club aprobaron en referéndum este plan, que supondrá una inversión de alrededor de 1.500 millones de euros. La operación se pagará en 35 años, con una fecha límite de 2057 y un período de carencia de los primeros cinco años, en los que solo se pagarán los intereses. Hace más de un año se pretendía que dichos intereses fueran de entre un 3% y un 4%, pero con la subida de tipos de interés la operación de deuda, que aún no está firmada, podría encarecerse.

Los trabajos de demolición empezaron el pasado noviembre aprovechando el parón del fútbol de clubes provocado por el Mundial de Qatar. Entonces, la entidad catalana aprovechó para derribar parcialmente la tercera gradería de la zona de Gol Sur, con una inversión de 4,6 millones de euros. 

De cara a los próximos meses, el Barça tiene previsto iniciar una segunda fase de la obra en la que se procederá al desmantelamiento del restante de la estructura. El club cifró en 93 millones la pérdida de ingresos por matchday con la mudanza temporal a Montjüic. 

A la vuelta al reformado estadio, en noviembre de 2024, con un tope el 70% de aforo, la entidad blaugrana sufrirá una merma de 38 millones durante esa temporada. Sin embargo, el club prevé sumar 151 millones extra por matchday en 2025-2026, ya con el 100% del aforo.

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