La Ligue-1 empeora sus previsiones de negocio. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) ha comunicado a los clubes de la Primera División del fútbol francés que prevé unas pérdidas de ingresos de 1.314 millones de euros en 2020-2021. De ser así, se alcanzaría un déficit récord en la Ligue-1, según informa L’Équipe.
Es una cifra que está por encima de los 800 millones de euros que Jean-Marc Mickeler, titular de la Dirección Nacional de Control y Gestión (Dncg, organismo regulador de las finanzas del fútbol profesional francés) comunicó que perderían los clubes de la Ligue-1 durante esta temporada.
La entidad afirmó a finales de diciembre que es necesario que los clubes pacten rebajas salariales con los futbolistas para evitar que el déficit se dispare. De hecho, el PSG ha presentado a la Dncg una previsión de pérdidas de 204 millones de euros, lo que supondría un alca de 60% respecto a 2019-2020, cuando perdió 125 millones de euros.
Esta crisis también ha provocado cambios en el mercado audiovisual. Mediapro, tenedor de un paquete del 80%, pagó 100 millones de euros para deshacerse de sus derechos, después de que la LFP se negara a negociar una rebaja de la cuota de 2020-2021. Ahora, la Ligue-1 ha dividido en dos el paquete de Mediapro para dar con un nuevo socio, y el grupo audiovisual catalán ha propuesto a la competición seguir emitiendo los partidos hasta que adjudiquen estos lotes.
Por otro lado, Canal+ ha denunciado a la LFP por licitar los derechos audiovisuales en Francia, algo que el operador quiere impugnar. El motivo es que Canal+ quería que la LFP realizara una nueva licitación de los derechos audiovisuales de la competición, incluyendo todos los paquetes, también los dos encuentros de la Ligue-1 bajo control de beIN Sports, que sublicencia a la televisión privada francesa.