LaLiga Santander recupera el tirón de la afición. Tras una pandemia en la que esta importante línea de negocio para muchos clubes se frenó en seco, el Gobierno puso un limitador a los clubes en un acelerón que no se ha podido evidenciar hasta la 2022-2023. Ahora, cerrada la campaña, los clubes cierran con notable alto su capacidad para atraer al público a los estadios. El rey de la asistencia fue el FC Barcelona, campeón dentro y fuera del césped con 83.498 espectadores por partido en el Spotify Camp Nou, según datos recogidos por 2Playbook Intelligence, la plataforma de inteligencia de mercado de 2Playbook. En total, en los 380 partidos de la temporada han acudido a los estadios 11,2 millones de espectadores, un 10% más que a cierre de 2018-2019, el último curso prepandemia sin limitaciones.
La buena senda del equipo sigue siendo el mayor estímulo para acudir a un campo de fútbol. De los seis primeros del ranking, sólo el Valencia CF no ha peleado por puestos europeos. Enfrascado en la batalla por mantener su plaza en la élite, el club che ha logrado que Mestalla presentara, de media, un aforo superior al 82% y más de 40.000 espectadores por partido. Y si se atiende a las últimas seis finales para el equipo de Rubén Baraja, la media se eleva al 86%, superando los 46.000 aficionados en la penúltima jornada, en su partido contra el Real Madrid.
En el top-10, muchos clásicos de Primera y dos clubes que han sufrido en la zona baja de la clasificación. A Real Madrid, Atlético de Madrid, Real Betis, Athletic Club, Valencia CF, Sevilla FC y Real Sociedad (por este orden), que se situaron en una horquilla de entre 32.189 y 56.661 espectadores de media, se sumaron RCD Espanyol y Real Valladolid, que congregaron en torno a 21.000 personas por partido en sus estadios. De hecho, el tercer equipo que desciende a Segunda junto a blanquiazules y pucelanos es el Elche CF, que cerró la temporada rozando los 20.000 espectadores de media en cada encuentro como local.
Fuera de los diez primeros en asistencia, destacan los que han peleado por Europa. La afición del Rayo Vallecano ha disfrutado de su equipo, salvado con mucha antelación y con opciones de Conference League casi hasta el último partido. En Vallecas se dieron cita en sus 19 partidos como local 12.534 espectadores de media, con un 86,4% de ocupación –el porcentaje más alto de Primera–, poco más que los 11.456 asientos ocupados en cada encuentro del Girona FC en Montilivi.
El club catalán, recién ascendido, no ha sacado finalmente billete europeo, pero cierra el curso con un 85,5% de ocupación media. Supera en la tabla de aficiones a CA Osasuna, que sí irá a Europa y con la reforma de El Sadar ha logrado alcanzar los 19.660 espectadores por partido y un 83,6% de asistencia media. Como colofón a su histórica temporada, la afición rojilla marcó récord de la temporada en el último encuentro: 22.128 espectadores se dieron cita en el campo, que alcanzó un aforo del 94%.
Hasta doce clubes superan el 80% de aforo
Las cifras de aforo azulgranas, que le permite recuperar el optimismo en el ticketing –fue el club europeo más afectado por el cierre forzoso de los estadios por la Covid–, van en sintonía con el resto de equipos de Primera División. El campeón registró un 86% de ocupación media. El mejor ejemplo es que 12 de los 20 estadios superaron el 80% de ocupación media, y sólo el RCD Espanyol bajó del 60%, aunque remontó algo en el tramo final, cuando el equipo más necesitó el aliento de su afición para intentar de lograr la permanencia. En el cómputo general, la ocupación media fue del 78% a cierre de la temporada.
En este punto cabe destacar al ya mentado Rayo o a la UD Almería. Impulsada por el retorno de su equipo a la máxima categoría y con la propiedad saudí prometiendo que “nunca volveremos a Segunda”, la afición rojiblanca rozó los 13.000 espectadores por partido durante la campaña, en la que el Estadio de los Juegos Mediterráneos cambió de nombre, para convertirse en el Power Horse Stadium, y elevó su capacidad hasta 16.503 asientos. En este análisis sobre la ocupación llama la atención que el Real Madrid se sitúe en la segunda mitad de la tabla, en el puesto undécimo, con un 81% de aforo medio y 56.661 espectadores por partido. Aunque los motivos pueden ser varios, parece evidente que no ha acompañado la realización de las obras del nuevo Bernabéu mientras el equipo jugaba sus partidos como local.
Esta temporada, sólo tres clubes no ocuparon dos tercios del aforo de sus estadios, algunos de ellos inmersos en reformas
Otro club que está de reformas es el RC Celta, que tuvo que estrenar hasta la última jornada para estrenar la grada de Marcador. Este hecho le ha impedido contar con 6.000 localidades más –hasta las casi 24.500 butacas–, que se llenaron en el último partido, crucial para la permanencia, contra el Barça. La afición celeste no falló a su equipo y ocuparon el 95,5% del Abanca Balaídos con 23.365 espectadores, frente al 76% de aforo medio en el resto de la campaña.
Este factor obras también ha impactado a Villarreal CF –que estrenó el reformado Estadio La Cerámica tras el Mundial; hasta Nochevieja jugó en el Ciutat de València del Levante UD– y al RCD Mallorca, que cerraron el curso con un 68,2% y un 61% de aforo medio. El resto de ocupantes del vagón de cola del tren de la asistencia pelearon hasta la última jornada también por las últimas plazas de la clasificación deportiva.
Sin embargo, salvo el ya citado RCD Espanyol, todos superaron el 63% de ocupación media que registró el Elche CF. Getafe CF (69,9%), Cádiz CF (70,9%) y el finalmente descendido Real Valladolid (75,9%) contaron con dos tercios del aforo ocupados en cada jornada como local. Cifras que ahora los clubes tratarán de monetizar mejor en las próximas temporadas con más y mejor oferta y un incremento en el porcentaje de espacios VIP y de hospitality para que esta fidelidad también les permita aumentar sus presupuestos.