El Inter de Milán encuentra el recurso para ganar liquidez y cubrir la deuda a corto plazo. El conjunto italiano está ultimando una nueva emisión de bonos por valor de 400 millones de euros, según Il Corriere dello Sport. Representantes del equipo se reunieron esta semana con Goldman Sachs, entidad financiera que maneja la operación, para tratar de cerrarla en los próximos días.
De esta forma, el Inter podrá amortizar la deuda de 375 millones que arrastra de una emisión anterior y debía saldar este año. La emisión de bonos, unto con las plusvalías generadas por la venta de jugadores como Hakimi o Lukaku, debe permitir proteger los posibles problemas de caja. Además, los diversos préstamos logrados a través de Oaktree garantizarían la liquidez del club al final de año.
La junta de accionistas tendrá lugar a finales de octubre y en ella deben aprobarse las cuentas de la pasada temporada. El club cerró el ejercicio con unas pérdidas de 245 millones de euros, récord en la Serie A. En total, la entidad propiedad del grupo chino Suning, facturó 364,7 millones de euros, un 2% menos interanual.
