Arabia Saudí insiste en su fuerte apuesta por el deporte. En este caso ha optado por apoyar a dos de los principales clubes de fútbol del país, en concreto, de Riad. El Al Hilal y el Al Nassr se han asociado con el fondo público saudí Qiddiya, para que se convierta en partner estratégico por 26,65 millones de dólares (23,5 millones de euros) por temporada para cada uno de los clubes hasta 2042. Los contratos podrán ser revisados cada cinco años según la información de Gulf News. El Al Nassr firmó recientemente una alianza con el Cádiz CF en busca de nuevos ingresos internacionales.
Como parte del acuerdo, el fondo saudí planea la construcción de un nuevo estadio en Riad con capacidad para 40.000 personas para compartir entre los dos clubes. Además, el proyecto incluye la construcción de un nuevo campo de golf bajo el diseño de Jack Nicklaus y el circuito de Qiddiya, que acogerá el Gran Premio de Fórmula 1 de Arabia Saudí a partir de 2024.
No se trata de un acuerdo aislado con los dos clubes de fútbol saudíes sino que forma parte del proyecto Vision 2030 del estado saudí con el que buscan revitalizar la economía más allá de la industria del petróleo. De hecho, desde las arcas del estado ya se ha financiado a otros clubes de fútbol del país como el Al-Ittihad y el Al-Ahli. El acuerdo económico alcanzado con la Central Jeddah Development Company fue exactamente el mismo: 26,65 millones de dólares (23,5 millones de euros) hasta 2042.
El máximo accionista de la sociedad es PIF, fondo soberano saudí, con 430.000 millones de dólares (369.500 millones de euros) en activos bajo gestión, que ya ha participado en operaciones de este calibre a lo largo del 2021. Entre ellas destacan la inversión de 200 millones de dólares (176 millones de euros) para desarrollar un nuevo circuito internacional de golf, la adquisición del Newcastle United de la Premier League o la puesta en marcha del primer mundial de lanchas eléctricas para el 2023.
El director general de Qiddiya, Abdullah bin Nasser Aldawood, ha aseverado que este acuerdo es “otro paso importante hacia nuestro objetivo de construir y desarrollar Qiddiya como un formidable centro deportivo que sea sede de competiciones locales, regionales e internacionales”.
El directivo saudí ha agregado que “los aficionados se sentirán inspirados por perseguir sus propios sueños deportivos, lo que en última instancia impulsará la contribución de la industria del deporte al PIB del país”.