Gerard López se encuentra contra las cuerdas en el Lille francés. El empresario luxemburgués, de origen español, podría vender en las próximas horas el Losc, como se conoce en Francia, acuciado por una deuda de 123 millones de euros y las malas previsiones que se manejan en el fútbol galo tras suspender la temporada 2019-2020. Sus acciones podrían pasar a manos de Callisto Sporting, sociedad filial del fondo de inversión Merlin Partners y que recomprará la deuda, según avanza L’Équipe.
Se prevé que la operación se cierre en las próximas horas, después de que este martes López se reuniera con el fondo de inversión Elliot, principal financiador del club de la Ligue-1. El fondo, junto a JP Morgan, prestó 225 millones de euros a López y aún restan por reembolsar 123 millones de euros, que Callisto Sporting estaría dispuesto a asumir.
López dejaría de ser máximo accionista y también presidente del club, que desde el diario francés apuntan a que pasará a ser dirigido por Olivier Létang. El ejecutivo llegaría a Lille como mano derecha del fondo comprador, radicado en Luxemburgo, y que está liderado por el neerlandés Maarten Peterman y el italiano Alessandro Barnaba.
La noticia se conoce pocas semanas después de que Marc Ingla abandonara la dirección general del club por motivos personales. El exvicepresidente del FC Barcelona se unió a la entidad francesa en enero de 2017 para ser la mano derecha de López.
Además del Lille, López es propietario del Excelsior Mouscron, de la Primera División de Bélgica, y desde el pasado octubre, del Boavista FC, equipo histórico de Portugal, que compite en la Liga NOS -la máxima división- y del que el empresario posee el 51% de las acciones.
Asimismo, el empresario gallego ya intentó entrar en España recientemente con la mayoría accionarial del CD Lugo, de la Liga SmartBank, un intento que finalmente quedó en frustrado. Por otro lado, López fue dueño de la escudería Lotus de Fórmula 1 antes de venderle a Renault el 65% del equipo en marzo de 2016.
