Cleveland Cavaliers abre la veda para incorporar patrocinadores para la ropa de entrenamiento. La franquicia se ha convertido en el primer equipo de la NBA en alcanzar un acuerdo de patrocinio para este activo. Se trata de Goodyear, que ya es espónsor principal, y que a partir de ahora luce su logotipo en la ropa que se utiliza en la preparación de los partidos.
Los términos económicos del acuerdo no se han hecho públicos, aunque se da por hecho que estaría por debajo de los más de 10 millones de dólares que, aproximadamente, se estima que están generando las franquicias con la venta de la publicidad en las camisetas de juego.
Se trata de un activo que los equipos de la liga norteamericana de baloncesto no explotaban, y que la competición ahora permite comercializar. De este modo, las franquicias podrán compensar la caída de ingresos por la pandemia del Covid-19. En el caso de Goodyear, la compañía de neumáticos que desde 2017 tiene visibilidad en la camiseta de juego de los Cavaliers. Ahora su acuerdo se ha extendido a la camiseta de entrenamiento.
Los jugadores de la NBA sólo pueden vestir esta equipación durante los entrenamientos y hasta una hora y media antes del partido. Esta iniciativa llega tres años después de que la liga norteamericana de baloncesto aprobara la inclusión de parches de patrocinio en los uniformes de partido, una medida que ha resultado un rotundo éxito. Sólo en 2019, las franquicias NBA ingresaron por este apartado 137 millones de dólares (122 millones de euros).