El FC Barcelona rebaja notablemente la deuda pendiente de pago por la contratación de futbolistas en los últimos años. En concreto, los compromisos adquiridos con otras entidades deportivas se ajustaron en un 28,4% en 2020-2021. Sin embargo, a pesar de la reducción, de casi cien millones, la entidad que ahora preside Joan Laporta todavía tiene todavía 115 millones por pagar a largo plazo de la compra de futbolistas, según las cuentas anuales consolidadas del club, a la que ha tenido acceso 2Playbook.

En concreto, la reducción es de 81 millones de euros. En esta lista de jugadores adquiridos destacan los centrocampistas. Esa línea de medios que guio los éxitos del club en la década anterior, compuesta por canteranos, ahora supone su mayor inversión. Del fichaje de Frenkie de Jong se anotan 16 millones al Ajax en el último año, pero todavía restan 32 millones por abonar. Por la venta de Philippe Coutinho, el Liverpool FC recibirá en los próximos cursos 13 millones, después de sumar 29 millones de euros en las cuentas de la última temporada. Y un futbolista que ya no está en la plantilla blaugrana, como Arthur Melo, aún le supone coste al club, que le debe 6,75 millones al Gremio brasileño. A corto plazo constan 8 millones.

El Ajax de Ámsterdam es, sin duda, el gran socio del Barça. Al dinero que adeuda por de Jong se suman otros 16 millones del fichaje de Sergiño Dest. Otro lateral, Emersol Royal, vendido al Tottenham este pasado verano, aparece en la lista con una deuda blaugrana de casi nueve millones con el Real Betis. Y aunque ya parezca lejano, el Barça mantiene compromisos a largo plazo con hasta con cinco equipos por la compra de Miralem Pjanic: 39 millones a repartir entre Juventus (37 millones), AS Roma, Olympique de Lyon, FC Metz y el club luxemburgués de Schifflange 95.

Desaparecen del largo plazo las deudas por otros futbolistas exbarcelonistas como Malcom, por el que la entidad se anota 10 millones a pagar al Girondins de Burdeos, o uno de los movimientos más extraños de la última junta del Barça: Matheus Pereira, otro brasileño, por cuyo fichaje todavía tenía por pagar 3,9 millones de euros a la Juventus.

En total, la deuda a corto plazo es de 115,7 millones, por los 115,4 millones que se mantienen del largo plazo. La reducción de los pagos a corto fue del 8,5% respecto al cierre de 2019-2020. Los compromisos del club se alargarán, por ahora, hasta 2023-2024, con un desglose que supone el pago de 82 millones de euros en 2022-2023 y 33,5 millones en la siguiente campaña.

La lista de ventas: un solar tras la Covid

Más allá de las salidas a coste cero o vía cesión de futbolistas que han sido pilares del equipo en los últimos años, como Messi, Suárez o Griezman, el club padeció en el último curso la hibernación del mercado de traspasos.

Como dato más reseñable, el futbolista por el que ingresará más dinero en los próximos años el club, según las últimas cuentas, es Jean-Clair Todibo. El defensa, sin apenas oportunidades en el equipo, marchó a Francia para enrolarse en el OGC Nice. Por su venta, el Barça tiene pendiente de cobro 8,2 millones. Es la mayor operación en una lista de ingresos totales de 25,4 millones de euros. Apenas iguales son la factura a corto y a largo plazo, con 12,9 y 12,4 millones de euros, respectivamente.

En el largo, la caída es abismal, de un 83%, desde los 155 millones de la campaña anterior, en la que cabe destacar las operaciones de trueque con la Juventus por Arthur Melo y Pjanic; o la anterior de Neto y Cillessen con el Valencia CF.

Los canteranos Akieme, de la UD Almería, y Abel Ruiz, del Sporting de Braga, dejarán unos 4 millones de euros cada uno, mientras que Konrad de la Fuente aportará 2,9 millones de euros tras su reciente venta al Olympique de Marsella.

El club todavía cobra pequeñas cantidades por Paco Alcácer, desde el Borussia de Dortmund, Mauro Icardi o Thiago Alcántara, por quienes PSG y Liverpool, respectivamente, pagan al conjunto blaugrana derechos de formación.