El Barça aspira a mantener el Erte para reducir sus gastos ante una caída de ingresos de al menos el 30% en 2020-2021 respecto a la temporada previa al Covid-19. El club ha anunciado que hoy se ha constituido formalmente la mesa de negociación para que empiece el procedimiento de modificación sustancial de las condiciones laborales de la plantilla y la realización de un expediente de regulación temporal de empleo.

“La afectación de la pandemia en este ejercicio es mucho más fuerte que en el anterior, en el que la incidencia se limitó al último trimestre, de abril a junio. La temporada en curso quedará afectada en su totalidad, por lo que el impacto negativo se multiplicará exponencialmente”, ha argumentado la entidad blaugrana.

El Barça asegura que la constitución de la mesa de negociación laboral se enmarca en el paquete de medidas que ha ido implementando en los últimos meses para ayudar a reducir el gasto y la masa salarial deportiva de todos los deportes profesionales. Sin embargo, en la pasada temporada el club sólo ahorró 42 millones de euros en masa salarial, una cuarta parte de lo que era necesario ajustar. De ahí que este año haya solicitado a sus jugadores reducirse el salario un 30%, algo que ha rechazado la primera plantilla y el filial.

En la actualidad, el desequilibrio entre la previsión de ingresos para esta temporada y el gasto de la última es de 165 millones de euros. “El objetivo del club es llegar a un acuerdo con todo el colectivo laboral de la entidad, que pase por una solución conjunta de adecuación salarial transitoria, gradual, proporcional, y específica para cada uno de los colectivos”, afirma la organización.

En otras palabras, la entidad insiste en que en la mesa de negociación deben participar los deportistas que, al igual que el resto de la plantilla no deportiva, consideran que las negociaciones deben realizarse por separado.  Por su parte, el Barça insiste en que “la configuración de esta mesa debe ser única” y en que “está abierto a la incorporación de la representación de los jugadores”. Eso sí, el club afirma que la mesa “permitirá la adopción de decisiones de acuerdo con las especificidades de cada colectivo, voluntad ya compartida con los jugadores profesionales”.

La intención del comité de empresa del FC Barcelona es que el personal no deportivo no se vea afectado

El FC Barcelona aplicó un Erte para todo el personal en marzo, cuando la pandemia obligó a frenar la actividad de la entidad. En total, el club da trabajo a 1.500 empleados. En aquel momento, los futbolistas y los jugadores del equipo de la ACB acordaron una rebaja salarial del 70% mientras durara el parón y decidieron realizar aportaciones adicionales para que los empleados del club pudieran cobrar el 100% de sus salarios.

Tal y como adelantó 2Playbook, los jugadores se han encomendado a Jorge Pecourt, abogado del caso Messi, y Tactic Group, agencia de representación de Sergio Busquets y Sergi Roberto, para recibir asesoramiento durante este proceso.

El comité de empresa del FC Barcelona ha comunicado al personal no deportivo que durante el encuentro con el club han reafirmado que no tienen legitimidad para representar a los deportistas del primer equipo de fútbol y que, consecuentemente, esta constitución viene condicionada al reconocimiento y el mantenimiento de la autonomía de la negociación de los colectivos del personal ordinario y de los deportistas profesionales.

“Nuestro colectivo ha dejado claro que los posibles acuerdos que se alcancen para cada colectivo serán de forma separada sin que vincule al otro”, ha explicado el comité. El calendario de la negociación marca el 5 de noviembre como fecha de finalización, días después de la fecha de la moción de censura. “Nuestra intención es que el procedimiento no afecte a los empleados no deportivos”, ha explicado a este diario Jaume Feliu, presidente del comité de empresa del Barça.