El FC Barcelona trabaja a contrarreloj para restablecer un patrimonio neto positivo y liberarse de las restricciones de LaLiga para clubes con problemas. La entidad presidida por Joan Laporta tiene avanzada la venta de Barça Licensing & Merchandising (BLM) por 200 millones de euros, como adelantó 2Playbook, pero eso no basta. De ahí que haya conversaciones para desprenderse de más negocios o ceder derechos para levantar 900 millones adicionales.
La dirección está trabajando con Goldman Sachs para estructurar una operación similar a la que se planteaba con CVC, de modo que el banco de inversión se haría con un 30% de los derechos audiovisuales del conjunto blaugrana por un determinado periodo de tiempo, según adelanta El Confidencial. Esta operación, indica, podría suponer la contabilización de 900 millones de ingresos extraordinarios.
La firma de este acuerdo no implica renunciar a la entrada en LaLiga Impulso, una decisión que podría precipitarse esta misma semana. Como adelantó este medio, el plan pasa por traspasar los derechos audiovisuales a una mercantil en la que CVC entraría como accionista. Así, los 270 millones que recibiría a cambio no computarían como deuda, sino como un ingreso extraordinario.
La decisión final, en cualquier caso, dependerá del resto de clubes, que son los que deben votar si aceptan que la operación se estructure de otro modo en el caso culé. Lo que no se va a variar es el destino del dinero: 70% a infraestructuras, 15% a refinanciar deuda y 15% a ampliar el límite salarial, lo que más urge a la dirección deportiva para poder acudir al mercado de fichajes.
En paralelo, también hay conversaciones con All Sports Finance (ASF), una firma de inversión que aportaría 400 millones de capital y financiación bancaria por 200 millones, según documentos analizados por el citado medio. A cambio, el fondo se quedaría un porcentaje sobre los ingresos futuros del club, previsiblemente aquellos relacionados con la explotación del Espai Barça una vez se completen las obras.
Ampliación del préstamo puente de Goldman Sachs
Hace justo un mes, el Barça pactaba hace justo un mes con Goldman Sachs una ampliación del préstamo puente que firmó en 2019 para iniciar los trabajos del Espai Barça. El club blaugrana y el fondo de inversión acordaron elevar a 180 millones de euros dicho crédito, el doble de lo que tenían firmado, y aplazar su vencimiento hasta 2023, según ha adelantado Goal.
Esta operación se remonta a tres años atrás, con Josep María Bartomeu en la presidencia. En aquel momento se firmó un préstamo puente de 90 millones de euros que expiraba en en verano de 2020, y con el que podía empezar las obras del Espai Barça. El club acabó extendiendo el plazo hasta agosto de 2021, y posteriormente Joan Laporta logró alargarlo hasta febrero de este año.
Ahora, a la espera de que la entidad culé y Goldman Sachs alcancen un acuerdo de financiación de 1.500 millones de euros para acometer las obras del estadio y su entorno, se ha pactado ampliar tanto el importe como el plazo. La idea es que este crédito se amortice una vez se pacte la nueva financiación con la entidad financiera, una operación que los socios han aprobado y que supone la mayor inversión patrimonial de la historia del club.
La deuda de 1.500 millones que se contraerá con Goldman Sachs se pagará en 35 años, con una fecha límite de 2057 y un período de carencia de los primeros cinco años, en los que solo se pagarán los intereses, de entre un 3% y un 4%.