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El Barça aprueba un presupuesto con ajuste salarial y negocio al alza para ganar dinero en 2021-2022

La asamblea blaugrana ha aprobado el presupuesto del club para esta temporada, en el que la masa salarial se rebajará a 470 millones de euros. La deuda neta escala hasta los 680 millones de euros y el gasto total se recortará un 21% interanual.

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El Barça tiene presupuesto para esta temporada. El club blaugrana ha aprobado en asamblea de compromisarios la proyección económica para 2021-2022, en la que se confía en incrementar los ingresos hasta los 765 millones de euros, con la vuelta del público al Camp Nou como principal motor de crecimiento. Además, el recorte a la masa salarial, que no superará los 470 millones tras el duro ajuste del verano, permitirá junto a la venta de Barça Studios el regreso a beneficios, con cinco millones de euros.

En la votación, la junta obtuvo el apoyo de 643 socios en este punto (el 94% de los presentes), el rechazo de 17 socios y la abstención de 23 socios. “Nuestro plan estratégico, es creíble. Hemos preferido hacer unos números que de cara a los inversores sean creíbles”, ha defendido en su exposición el vicepresidente, Eduard Romeu. “Tienen un punto de ambición”, ha añadido el presidente, Joan Laporta, cuestionado por los ingresos no firmados que confían obtener y son vitales para volver a beneficios ya esta temporada.

Eso sí, el dirigente ha admitido que para cumplir serán necesarias algunas operaciones extraordinarias, como la venta parcial de Barça Studios, así como la firma de nuevos patrocinadores por al menos 25 millones de euros y rematar algunas rebajas salariales que aún se están negociando.

Sobre todo esto, el presidente de la comisión económica, Jaume Guardiola, ha admitido que esta operación corporativa y su inclusión de antemano “es un reto”, si bien ha defendido que son unos presupuestos que, por contención de gastos y prudencia en los ingresos, “van en la buena dirección, pero aún es insuficiente para hacer un restablecimiento del equilibrio patrimonial. El club está obligado a presentar beneficios positivos cada temporada con unas cifras superiores”.

Eso sí, en su opinión podría irse más allá y elaborar la proyección anual sin tener en cuenta las plusvalías por traspasos, de modo que esos extraordinarios puedan destinarse a reducir deuda, financiar inversiones o mejorar la tesorería.

Los ingresos ordinarios subirán un 21,2% interanual esta temporada, hasta 765 millones de euros. Los gastos se recortarán un 21% por los costes extraordinarios cargados al último ejercicio, de modo que se pasará de 1.136 millones a 784 millones de euros. Es decir, que el resultado de explotación será negativo en 19 millones de euros.

¿Y el beneficio? “Se prevé compensar con la obtención de un resultado neto financiero positivo de 23 millones de euros”, señala la información remitida a los propietarios del club. Este punto se refiere a la contabilización de 50 millones por la venta de un 49% del brazo audiovisual, algo que también ha sido sometido a votación entre los socios compromisarios. Esta operación sólo se frenará si el aumento del negocio del ticketing permite ganar más tiempo para negociar.

A ello se suma el impacto de la refinanciación de deuda acordada con Goldman Sachs, que ha abarato el tipo de interés a pagar, situándolo en el 1,98% anual, casi la mitad o menos en comparación con el coste de las operaciones a corto plazo que se fueron firmando durante la pandemia para no estrangular la caja del club. El préstamo ha permitido refinanciar 525 millones a diez años, con la opción de ampliarlo en 70 millones más.

La junta señala que la deuda neta a 30 de junio de 2021 alcanzó los 680 millones de euros, un 39,5% más interanual. La deuda ajustada baja a 558 millones, debido a que el sistema de cálculo de LaLiga permite dejar fuera del importe todas las inversiones en patrimonio. De ahí que se incumpla ampliamente el ratio de deuda sobre ebitda, de nueve veces frente a los dos que marcan los estatutos. De ahí que la junta haya pedido una carestía de al menos dos años para incumplir sin tener que presentar su dimisión.

En cuanto al patrimonio neto, las pérdidas de 481 millones del ejercicio 2020-2021 han provocado que a cierre de junio el saldo pase a ser negativo en 451 millones de euros. Esto implica que el club se encuentre en una situación de quiebra técnica, si bien la realidad es que cuenta con activos suficientes para mantener las operaciones.

En lo que se refiere a la mejora de ingresos, el salto más importante tiene que ver con la explotación del estadio, cerrado durante el último año y medio. La junta de Joan Laporta confía en que su aportación pase de 25 millones en 2020-2021 a 119 millones de euros, siempre y cuando se mantenga un aforo permitido de al menos el 60% de la capacidad del Camp Nou y el Palau Blaugrana.

Los derechos de televisión aportarán un 3% menos, hasta 273 millones, pues el año pasado se contabilizaron parte de los ingresos de 2019-2020 al disputarse parte de la temporada en julio y agosto. Aquí está por ver cómo puede afectar negativamente la no clasificación del primer equipo para octavos de la Champions League, lo que podría suponer una merma de más de 21 millones respecto al presupuesto, en el que suele contabilizarse que mínimo se alcanzan los cuartos de final.

En el área comercial se ha contemplado un crecimiento del 9% interanual, hasta 292 millones de euros. El club atribuye esta previsible mejora a “la reapertura de las tiendas de venta de merchandising”, que compensarían “las extensiones de algunos patrocinadores de una temporada a la baja firmadas durante la temporada pasada”.

Por último, la partida de traspasos y otros extraordinarios se disparará un 45%, hasta 81 millones de euros, y aquí puede haber cierta polémica de cara a la asamblea. Parte de esos ingresos se corresponden con “la reversión de los deterioros de los jugadores cedidos (Griezmann y Trincão)”. Es decir, que parte de las costes extraordinarios de 138 millones por la depreciación de jugadores que se ha cargado al último año de Josep Maria Bartomeu en la presidencia, en 2021-2022 ayudarán a hacer crecer los ingresos.

La junta ya anunció que presentará un cierre de ejercicio de 2020-2021 con unas pérdidas de 481 millones de euros, en los que a los 138 millones por el deterioro acelerado del valor de la plantilla, se le suman 90 millones en provisiones por litigios, de los cuales aún no ha explicado cuáles son. En su momento, el club confirmó que ahí estaba el pulso legal con Neymar, con el que se llegó a un pacto, pero finalmente echaron marcha atrás en esa decisión.

De ahí que sea tan difícil ver una evolución real del gasto del próximo curso, pues la partida de otros pasará de 350 millones a sólo 64 millones de euros. El esfuerzo más alto se ha realizado en la reducción de salarios deportivos, que bajarán un 24%, hasta 470 millones de euros, tras la salida de Leo Messi y las rebajas salariales acordadas con los capitanes (Gerard Piqué, Sergio Busquets, Jordi Alba y Sergi Roberto).

El resto de sueldos no deportivos se incrementarán un 14%, hasta 57 millones, por la recuperación del personal de tiendas y “nuevas posiciones previstas para cumplir con las exigencias del Plan Estratégico”.

El resto de gastos de gestión, donde ahora se incluye las amortizaciones de fichajes, se incrementarán un 39%, hasta 193 millones de euros. Aquí, el argumento es “la reapertura de las instalaciones y los costes necesarios para poner en marcha toda la operativa de partido (venta de entradas, seguridad, limpieza, etc.), así como por los costes de venta de las tiendas propiedad del Club”, según la documentación.

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